Cómo mejorar la certificación energética de tu vivienda
Ventanas con prestaciones térmicas, revestimientos aislantes y una caldera eficiente son las claves para mejorar su calificación energética.
Al igual que los electrodomésticos, actualmente las viviendas cuentan con una etiqueta que las clasifica energéticamente con un sistema identificativo de la A a la G, de más a menos eficiente. Si quieres reformar tu casa para mejorar su calificación energética y hacerla más eficiente, seguro que los consejos de mr2arquitectos te sirven como orientación.
La certificación energética de un edificio es un documento que se obtiene tras un examen de calificación de la vivienda realizado por un técnico certificador, que se materializa en una etiqueta de eficiencia energética. Además de clasificar energéticamente los inmuebles, asignándoles una letra que va de la A a la G, estos informes de certificación energética aportan unas pautas de medidas de mejora concretas para cada vivienda. Así que si quieres saber cómo conseguir que tu casa sea más eficiente energéticamente, deberás estudiar y seguir esas recomendaciones.
Como explica Noelia Martínez, arquitecta de mr2arquitectos, “las medidas de mejora informan sobre qué tipo de actuaciones se deben tener en cuenta a la hora de reformar una vivienda con el objetivo de que su clasificación o letra energética mejore”, lo cual tiene como consecuencia una reducción del consumo energético y un ahorro en las facturas.
El informe expedido por el técnico certificador contempla reformas que se pueden realizar en dos niveles: por un lado, el individual, es decir dentro de la propia vivienda, y por otro el comunitario, o sea en el edificio. Las segundas son las más complicadas de poner en marcha ya que requieren el acuerdo de la comunidad de vecinos, pero muchas veces son las más efectivas. “Hay que concienciar a los vecinos de que todas las viviendas se van a beneficiar con una reducción del consumo energético”, dice Noelia Martínez.
En lo que se refiere a las reformas que se pueden hacer en el plano individual, dentro de nuestra vivienda, las principales medidas serían las siguientes:
- Cambia la carpintería de las ventanas y los vidrios por otros con mejores prestaciones térmicas: vidrios dobles de baja emisividad, ventanas con rotura de puente térmico, cajas de persianas aisladas y otras medidas similares.
- Aisla térmicamente las paredes que dan al exterior de la vivienda, trasdosando por el interior con aislante y placas de tipo pladur.
- Sustituye la caldera individual por una bomba de calor o por otra caldera más eficiente. En el caso de que tengas radiadores eléctricos, es prioritario sustituirlos siguiendo las indicaciones del informe.
Según los expertos de mr2arquitectos, en la mayoría de las ocasiones no es suficiente con llevar a cabo una única reforma para mejorar la letra energética, sino que hay que aplicar un conjunto de ellas. Otras veces hay que recurrir a realizar, además, mejoras de tipo comunitario. “El certificado energético te dice exactamente qué hay que hacer para mejorar, y las nuevas características que deberían tener elementos como las ventanas, la caldera, el aislamiento, etc.”
Algunas de las medidas más efectivas que se pueden llevar a cabo en el exterior de la vivienda, es decir en el plano comunitario, incluyen:
- Reformar las fachadas colocando un revestimiento exterior con productos aislantes. “Se han desarrollado muchos productos para rehabilitación y obra nueva que protegen y aíslan el edificio significativamente. Existen muchas soluciones, como productos líquidos o paneles de revestimiento”.
- Sustituir las ventanas de forma conjunta, eligiendo unos perfiles y unos vidrios que cumplan las recomendaciones que aparecen en el informe.
low energy heating
- Cambiar las calderas comunitarias para la calefacción y el agua caliente por otras de alta eficiencia, e incluso sustituir el tipo de combustible; esto mejora en gran medida la reducción del consumo energético. Explica la arquitecta Noelia Martínez que “las energías renovables (biomasa, biocarburantes, geotermia, paneles solares, etc.) puntúan muy alto a la hora de certificar una vivienda”. Esto se traduce en una letra energética de las más altas, A o B.
Todo aquello que implique reducir el consumo energético es positivo y recomendable para una vivienda, aunque actualmente invertir en electrodomésticos eficientes, iluminación de bajo consumo o grifos con sistemas de ahorro de agua son medidas que no se contemplan a la hora de certificar una vivienda. Como tampoco se considera que afecte a la calificación energética de las viviendas intervenir en cocinas, baños, colocar un pavimento cerámico o una madera determinada.
Cómo ahorrar con los electrodomésticos
Cómo ahorrar con los electrodomésticos
De esta forma, a día de hoy, a la hora de ejecutar una reforma dirigida exclusivamente a obtener una letra más alta en nuestra etiqueta energética, nuestro objetivo debe ser centrarnos en los elementos propios de la edificación destinados a reducir el consumo de energía. Por lo tanto, nuestra atención deberá recaer en aislar mejor la vivienda (paredes, ventanas, y cubierta), y en tratar de obtener la calefacción y el agua caliente mediante energías renovables.
¿Cómo se consigue el certificado energético? Cada comunidad autónoma cuenta con un registro de profesionales habilitados para hacer este tipo de certificaciones. El técnico evaluará la vivienda y emitirá el informe, que deberá tener el visto bueno de la administración.
Lee este otro artículo si quieres saber más sobre la certificación energética de los edificios
CUÉNTANOS…
¿Has hecho alguna reforma para obtener una mejor certificación energética? Comparte con nosotros tu experiencia en la sección de comentarios.
Lee este otro artículo si quieres saber más sobre la certificación energética de los edificios
CUÉNTANOS…
¿Has hecho alguna reforma para obtener una mejor certificación energética? Comparte con nosotros tu experiencia en la sección de comentarios.