Muebles y accesorios
Clásicos Modernos
El Chester: Un clásico que no deja de reinventarse
Te descubrimos su historia y algunas de las reinterpretaciones más interesantes de este diseño atemporal.
El Chester es un referente del diseño de sofás presente en muchos hogares. Recientemente ha protagonizado la parrilla televisiva gracias a un exitoso programa de entrevistas que lleva su nombre. Aquí te contamos su historia, te enseñamos algunas de las reinterpretaciones del modelo original y te damos ideas sobre cómo integrarlo en distintos ambientes.
Algunos lo conoceréis de sobra y otros lo habréis visto miles de veces pero no conocéis su nombre ni origen. Sea como fuere, la omnipresencia del Chester es indiscutible. Un modelo de sofá que nunca pasa de moda y que se relaciona con elegancia y distinción al más puro estilo británico.
El sofá Chesterfield, popularmente conocido como Chester, tiene sus raíces en el Reino Unido, entre los siglos XVIII y XIX –aquí las versiones de su historia varían– y fue encargado a un ebanista de la época por parte del Vizconde de Chesterfield para amueblar los exclusivos clubes de caballeros de la alta sociedad.
Los brazos curvos y el tapizado capitoné son las otras dos características esenciales del Chester. Algunas versiones de su historia lo califican como el primer canapé totalmente tapizado y en otras incluso se habla de que aquel ebanista inglés inventó este tipo de tapizado, aunque al parecer se venía utilizando con anterioridad pero no en sofás.
Desde entonces el capitoné se relaciona con el mundo del lujo. Confiere cierta rigidez y fuerza al tapizado y, si se trata de un modelo contemporáneo, supone un guiño al pasado por su factura artesana.
Desde entonces el capitoné se relaciona con el mundo del lujo. Confiere cierta rigidez y fuerza al tapizado y, si se trata de un modelo contemporáneo, supone un guiño al pasado por su factura artesana.
La premisa para su diseño era que favoreciera la adopción de una postura correcta y varonil, con la espalda recta y el cuerpo erguido, propia de los caballeros de la sociedad inglesa del XIX. Para lograr esta postura tan rígida e impensable en un sofá de nuestros días, el ebanista creó una pieza en la que el respaldo y los reposabrazos estuvieran a la misma altura y el asiento no fuera muy profundo.
El sofá no es una pieza sólo apta para ambientes lujosos. El lujo actual es un lujo contenido, relacionado más con un interés creciente por tener nuestros hogares mas confortables y mejor decorados que por la ostentación pura y dura. Por ello, a pesar de su aspecto distinguido, el Chesterfield se ha ‘democratizado’ y puede integrarse en una decoración ecléctica e informal, saliendo de su encorsetado estilo british.
Cómo elegir el mejor sofá para tu salón
Cómo elegir el mejor sofá para tu salón
Como en la moda, en la decoración el éxito reside en la mezcla de estilos, de manera que podemos colocar un Chester en un ambiente moderno sin que desentone, interpretándolo, como decíamos, como un guiño al pasado y a la tapicería artesana.
Además, si no nos ceñimos al clásico original sofá de cuero marrón y jugamos con tapicería en textiles de colores claros, podemos colocar nuestro Chester en un espacio luminoso y femenino, contradiciendo al vizconde que lo ideó exclusivamente para hombres.
El sofá es la pieza más importante del hogar…. Según Guillermo Torrent, director de Arte de la firma valenciana de sofás de lujo Ascensión Latorre,el sofá Chester es ideal para decorar el hall de un hotel o una consulta privada. Sin embargo, “si queremos disfrutar de un Chester en nuestro hogar y hacer vida en él, debería ser un modelo reinterpretado. Sobre todo habría que darle más profundidad de asiento y levantarlo de respaldo”.
Y es que actualmente nos gusta sentarnos algo más recostados y poder subir los pies en los asientos. “En definitiva, vivir nuestro sofá de forma más lúdica para poder jugar en él con nuestros hijos, abrir nuestro portátil y navegar por la red o hacer el amor con nuestra pareja”. Su interpretación del estilo Chester en el modelo Grand National cumple con estas condiciones. Además, a eso hay que añadirle comodidades como estantes iluminados en la parte posterior del respaldo, que sirven de librería o mueble bar.
Y es que actualmente nos gusta sentarnos algo más recostados y poder subir los pies en los asientos. “En definitiva, vivir nuestro sofá de forma más lúdica para poder jugar en él con nuestros hijos, abrir nuestro portátil y navegar por la red o hacer el amor con nuestra pareja”. Su interpretación del estilo Chester en el modelo Grand National cumple con estas condiciones. Además, a eso hay que añadirle comodidades como estantes iluminados en la parte posterior del respaldo, que sirven de librería o mueble bar.
El Ikon, de la firma de tapizados B&V, es una de las interpretaciones actuales que más respeta la idiosincrasia del original británico. Combina el laborioso acabado capitoné con una estructura aérea de bañera en acabados de chapa natural sobre patas de acero, lo que le confiere un aire más moderno y le aporta ligereza. Un diseño sobrio, muy geométrico, que se define por su contundente elegancia.
Foto: Cualiti
Pero quizás la reinterpretación del Chester más deconstruída que hemos encontrado es el modelo Simone de Missana, creado por las diseñadoras Sputnik. Formas femeninas, elegantes pero sugerentes, que recuerdan a un piano de cola (de ahí el homenaje a Nina Simone). Su respaldo es lo que más nos traslada al Chester, con una tapicería texturizada en un falso capitoné. Un modelo seguro que haría al vizconde de Chesterfield llevarse las manos a la cabeza.
Ya sea un modelo clásico o una reintepretación moderna, ¿quién no ha soñado alguna vez con tener un Chester en casa? El problema es que no todos podemos permitírnoslo, pero para eso está la imaginación de diseñadores como Jeroen van de Kant, capaz de crear un Chesterfield hinchable al alcance de cualquier bolsillo. La firma holandesa BloField cuenta con modelos de una, dos y tres plazas realizados en PVC con protección UV en distintos colores. Quizás no tenga la aterciopelada textura de la piel, pero seguro que impacta a todas las visitas.
¿Y TÚ?
¿Tienes un Chester en casa?
¡Enséñanoslo! Cuelga tus fotos en la sección de comentarios
Pero quizás la reinterpretación del Chester más deconstruída que hemos encontrado es el modelo Simone de Missana, creado por las diseñadoras Sputnik. Formas femeninas, elegantes pero sugerentes, que recuerdan a un piano de cola (de ahí el homenaje a Nina Simone). Su respaldo es lo que más nos traslada al Chester, con una tapicería texturizada en un falso capitoné. Un modelo seguro que haría al vizconde de Chesterfield llevarse las manos a la cabeza.
Ya sea un modelo clásico o una reintepretación moderna, ¿quién no ha soñado alguna vez con tener un Chester en casa? El problema es que no todos podemos permitírnoslo, pero para eso está la imaginación de diseñadores como Jeroen van de Kant, capaz de crear un Chesterfield hinchable al alcance de cualquier bolsillo. La firma holandesa BloField cuenta con modelos de una, dos y tres plazas realizados en PVC con protección UV en distintos colores. Quizás no tenga la aterciopelada textura de la piel, pero seguro que impacta a todas las visitas.
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