Arte y Diseño: Una relación fructífera llena de sorpresas
Diseñadores que hacen muebles inspirados en obras de arte –de Dalí a Matisse– hablan sobre el valor de su trabajo.
Aquel vestido de seda que Yves Saint Laurent diseñara en 1965, imbuido por los cuadros geométricos de Mondrian, ha pasado a la historia por ser una pieza emblema del diseño inspirado en obras de arte. Una dinámica creativa que sigue viva, también en el mundo de los muebles. Los colores de Henri Matisse, la complejidad formal de Frank Lloyd-Wright o la ligereza de la escultura griega Victoria de Samotracia…, la Feria ARCO, celebrada hasta el pasado domingo en Madrid, nos sirve de excusa para indagar en la relación entre el Arte y el Diseño, así como en algunas de estas piezas que han inspirado a algunos diseñadores contemporáneos con resultados llamativos e interesantes.
Xai - Dalí
“Algunas de estas piezas inspiradas en muebles son perfectas plásticamente hablando. Tu cerebro lee y entiende que eso es bello: la misma sensación que produce ver las obras de arte en las que se inspiran”, afirma el artista madrileño Germán Gómez: “Pero la diferencia es que en el arte no hay la intención comercial que sí vemos en el diseño de muebles”, explica.
Perfección plástica hay de sobra en Xai (en la imagen), mueble firmado por el diseñador Oscar Tusquets, e inspirado en el cordero-mesa con cajón que Salvador Dalí pintara en Proyecto de interpretación para un establo-biblioteca. Presentada en la Feria del Mueble de Milán, en 2014, y a 36.500 euros cada pieza, para la primera tirada de esta surrealista mesa se disecaron 20 corderos.
Perfección plástica hay de sobra en Xai (en la imagen), mueble firmado por el diseñador Oscar Tusquets, e inspirado en el cordero-mesa con cajón que Salvador Dalí pintara en Proyecto de interpretación para un establo-biblioteca. Presentada en la Feria del Mueble de Milán, en 2014, y a 36.500 euros cada pieza, para la primera tirada de esta surrealista mesa se disecaron 20 corderos.
Xai - Dalí
“Nos gustaría que nuestros muebles dalilianos tuvieran esa función didáctica, que la gente fuera luego al museo a descubrir la obra de Dalí… aunque no sabemos si llegamos a tanto”, confiesa Jordi Arnau, director general de la tienda BD Barcelona, donde venden, bajo la supervisión de Fundación Gala-Salvador Dalí, los diseños que el genio catalán pintó o dibujó, incluyendo el popular Dalilips.
Ya en los años 80, BD sorprendió editando el mobiliario que Gaudí creara para sus famosas casas y edificios.
Dalilips: La historia del sofá más sensual del diseño español
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La firma Boca do Lobo es experta en muebles que coquetean con el arte, como la cómoda Guggenheim o el aparador Mondrian.
“La inspiración es un proceso que se sitúa entre tus experiencias pasadas y el futuro. Es importante planificar viajes, estudiar a tus artistas contemporáneos favoritos, visitar museos, conocer nuevas culturas…”, cuenta el diseñador jefe y mánager de marca, Marco Costa, para quien el auténtico reto es que sus piezas pasen de generación a generación, “como una joya”.
La última pieza de su catálogo en sumarse a la lista de muebles inspirados por obras de arte se ha bautizado como Sinfonier Frank. Lo podemos ver a la izquierda, un lujoso mueble que se inspira en la La casa de la Cascada (1935), del reconocido arquitecto Frank Lloyd Wright,
“La inspiración es un proceso que se sitúa entre tus experiencias pasadas y el futuro. Es importante planificar viajes, estudiar a tus artistas contemporáneos favoritos, visitar museos, conocer nuevas culturas…”, cuenta el diseñador jefe y mánager de marca, Marco Costa, para quien el auténtico reto es que sus piezas pasen de generación a generación, “como una joya”.
La última pieza de su catálogo en sumarse a la lista de muebles inspirados por obras de arte se ha bautizado como Sinfonier Frank. Lo podemos ver a la izquierda, un lujoso mueble que se inspira en la La casa de la Cascada (1935), del reconocido arquitecto Frank Lloyd Wright,
El mueble se compone de 9 cajones, que evocan esa arquitectura de niveles de la casa de fin de semana que Wright diseñara para Edgar Kaufmann en una reserva natural de Pensilvania, EE UU. Trabajados a mano, en la pieza no hay rastro alguno de hormigón. En su lugar, manijas en latón pulido y detalles chapados en oro.
“Esta creación refuerza el estatus del arte en el mundo del mueble”, describen desde estudio portugués con sede en Oporto, a cuyo diseñador, Marco Costa, vemos en la foto.
“Esta creación refuerza el estatus del arte en el mundo del mueble”, describen desde estudio portugués con sede en Oporto, a cuyo diseñador, Marco Costa, vemos en la foto.
Durante el siglo XIX y en plena industrialización de la vida y de la creación, el diseñador e intelectual inglés William Morris declaró que el arte debía formar parte de los objetos cotidianos: una concepción vanguardista (y socialista) del diseño industrial que aún hoy sigue vigente
Lo demuestra el trabajo de jóvenes diseñadores como el arquitecto Ákos Huber, quien conmovido por “la ligereza” de la estatua griega Victoria de Samotracia, del Museo del Louvre, ha diseñado, en madera de haya, un sofá “cómodo” para dos personas: el Wing Sofa (arriba, en la imagen). La pieza es aún un prototipo, pero se espera que llegue al mercado “muy pronto”.
Disfruta en Houzz de ambientes decorados con papeles pintados diseñados por William Morris
Lo demuestra el trabajo de jóvenes diseñadores como el arquitecto Ákos Huber, quien conmovido por “la ligereza” de la estatua griega Victoria de Samotracia, del Museo del Louvre, ha diseñado, en madera de haya, un sofá “cómodo” para dos personas: el Wing Sofa (arriba, en la imagen). La pieza es aún un prototipo, pero se espera que llegue al mercado “muy pronto”.
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“No busqué ninguna similitud formal entre la estatua y mi diseño, sino contar las sensaciones que sentí en el Museo del Louvre. Se trata de que los clientes disfruten de estas sensaciones en un entorno cotidiano”, dice este artista húngaro, quien ha sabido unir historia, belleza y funcionalidad hasta dar con un objeto sorprendente.
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Ya de mayor, Sonya pudo ver por fin el cuadro El Caracol: “Fue en la Tate Modern. Era más grande de lo que imaginaba y me dejó abrumada. Esas formas y colores están presentes en mis piezas”, cuenta sobre sus cubistas alfombras, que han causado gran impacto, precisamente, por sus figuras bidimensionales.
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