Pregunta al experto: Descubre qué hacer en tu jardín en mayo
Tiempo de rosas, ruiseñores y jaras, pero también de siega, siembra y, sobre todo, disfrute para los sentidos.
Días largos, sol y buen tiempo: únicamente durante el mes de mayo, uno puede observar el fenómeno de explosión vital y floral, que ofrece un jardín cuidado. Los mejores ejemplos los tenemos –y vemos– en las rosas (Rosa sps.) y peonías (Paeonia lactiflora y suffruticosa), con sus enormes corolas y colores. Además, otros protagonistas los encontramos en los polinizadores, en los pájaros y, claro, en el huerto, donde cada día, si somos lo cuidamos con esmero, veremos crecer una buena cosecha.
Un jardín por estrenar. El jardín que podemos disfrutar durante el mes de mayo es nuevo. En él, todo acaba de nacer. Más adelante, ya durante el pleno verano, quedarán pocas cosas por florecer y los follajes se mostrarán cansados. Pero ahora todo reluce. Mayo es el momento de las especies de temporada o anuales, como estos claveles chinos (Tagetes patula) que rodean y cercan este macizo de rosas y laureles, o los tagetes de las Indias y salvias (Tagetes erecta y Salvia nemorosa), combinaciones triunfantes y coloridas.
Y mayo es, sobre todo, la segunda oleada de los bulbos. Todo empezó, allá por los meses de febrero y marzo, con los nazarenos (Muscari armeniacum) y crocus (Crocus vernus). Continuó –y estos son ya palabras mayores–, con los narcisos, jacintos, tulipanes… En mayo, toman el relevo los pesos pesados, las grandes bulbosas de la primavera y el verano, con la mejor flor del mundo a la cabeza: el lirio (Iris germanicum). Nada menos. Al lirio le siguen las maravillosas begonias tuberosas (Begonia tuberhybrida), azucenas (Lilium candidum) y calas (Zanthedeschia aethiopica). La conclusión es que no hay mejor inversión para el jardín que los bulbos. Atracción y decoración, pero, además, belleza a raudales.
7 bulbos y semillas de estilo de casa de campo
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La poda de setos. Es un hecho que no hay nada peor para tus setos que podarlos muy de tarde en tarde. Cuando te decides a hacerlo tras demasiado tiempo, han crecido demasiado y, tras la poda, dejarán al descubierto zonas interiores peladas o desnudas. Además, el trabajo de poda a un seto demasiado crecido es ímprobo y complicado. El consejo es cortar un seto alto dejando más ancha la zona inferior que la superior, para que soporte bien los vientos y otros accidentes. Tras la poda, es conveniente incorporar a la pared vegetal un producto hormonal reforzante de las defensas naturales y no dejarle a merced de plagas y enfermedades.
Es durante el mes de mayo, cuando un buen observador puede deleitarse con los trigos y cebadas que maduran y engordan al sol, cubriéndolo todo de verde; las riberas con los sauces y alisos en flor; los hayedos y robledales con hojas jóvenes y claras; los pinares llenos de piñas tiernas. Ese mismo observador sabrá ver que dentro del jardín hay que tener cuidado con los hierbajos o malas hierbas (simplemente hierbas fuera de lugar): afean los macizos y parterres. En caso de infestación, nada mejor que hacer uso de la desbrozadora de hilo, una sencilla y, sí, salvadora máquina. Ahí fuera, más allá de las lindes del jardín, en la campiña, crecerán las manzanillas, llantenes, viboreras, vezas, colzas, tréboles… Y, por supuesto, las rojas, soberbias y evocadoras amapolas (Papaver rhoeas), que cubren cunetas y terraplenes enmarcando vidas y recuerdos.
Cómo crear un jardín de ensueño en el jardín
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Descubre el reino de los aromas. Desde que en el mes de abril abre en Extremadura la primera jara (Cistus ladanifer), se da el pistoletazo de salida hacia el reino de los aromas, que en mayo tiene su culminación con el momento de máxima floración. Nadie puede resistirse a la Espírea (Spiraea arguta “Graciosa"), en plena floración, y con su maravilloso perfume a miel. O la Rosa centifolia, premiada con el galardón a la flor más olorosa de 2012 por la Royal Horticultural Society de Londres.
Pero no sólo de aromas viven las flores de mayo. Nuestras aromáticas, por ejemplo, segregan los aceites esenciales que ahuyentan a sus parásitos y que para nosotros significarán una estupenda farmacopea. Otras producen en el interior de sus corolas el néctar azucarado que atrae y orienta al utilísimo gremio de los insectos polarizadores: estos, al entrar en ellas, impregnan sus lomos con el polen dispuesto por los estambres a modo de cortina. Luego, están las rosas antiguas, como ésta rugosa de la fotografía, que aúnan en sí mismas todas las virtudes mencionadas
Pero no sólo de aromas viven las flores de mayo. Nuestras aromáticas, por ejemplo, segregan los aceites esenciales que ahuyentan a sus parásitos y que para nosotros significarán una estupenda farmacopea. Otras producen en el interior de sus corolas el néctar azucarado que atrae y orienta al utilísimo gremio de los insectos polarizadores: estos, al entrar en ellas, impregnan sus lomos con el polen dispuesto por los estambres a modo de cortina. Luego, están las rosas antiguas, como ésta rugosa de la fotografía, que aúnan en sí mismas todas las virtudes mencionadas
La gran mayoría de árboles y arbustos, como éste delicioso castaño de flor roja (Castanea carnea), florecen ahora y ayudan a decorar el estrato superior del jardín. Son la celinda (Philadelphus coronarius), tulíperos (Liriodendron tulipifera), magnolios (Magnolia grandiflora), robinias o falsas acacias (Robinia pseudoacacia), etc. El césped, a su alrededor, crece y crece, obligándote a segar y regar sin cesar –ahora se entiende aquel sabio consejo que recomienda no sembrar demasiados metros cuadrados; los setos se tupen, aislándote de vistas, vientos y polvo; y en el huerto, manzanos, membrilleros y perales han florecido, mientras las cerezas ya han cogido color y empiezan a ser recolectadas. Por qué no aprovechar la fresca de la mañana o emplear el atardecer, y empezar a plantar tomates, pimientos y berenjenas. Sí, siempre dan mucho trabajo y salen más caros que si se compran en la frutería, pero la diferencia es que, si tú los cultivas, no dejarán de ser los amados y valiosos frutos de tu tierra.
El jardín comestible: Ten tu propio huerto y a la vez un fértil vergel
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¿Sabías que la rosa (Rosa sps.) es la flor más popular del mundo? ¿Y que, prácticamente, no hay jardín en el que falte, al menos un ejemplar de cualquiera de sus numerosas especies y variedades? ¿Y que es la flor más manipulada, mejorada, seleccionada y vendida de todas? Bueno, pues el mes de mayo es su mes. Ahora florecen todas, consiguiendo llenar de colores, formas y aromas nuestros rincones favoritos al sol, disfrutando de la recién calidez del exterior.
Las tienes de todos los portes y tamaños, desde las enanas –miniaturas de un palmo–, hasta las gigantescas trepadoras de entre 6 y 8 metros de longitud, como la de la imagen, la Rosa banksiae, tal vez la trepadora más cotizada. Colores y aromas hay muchos. Las hay con corolas simples –de 5 pétalos–, pero también encontramos las complicadas centifolias, cuyos pétalos tienen tantas y buenas propiedades medicinales. Crea tu macizo de rosas o, por qué no, tu particular rosaleda, y disfruta de todas sus bellísimas facultades en mayo, pero también prácticamente en el resto de la temporada cálida, hasta bien entrado el otoño.
Cuidados y trucos para tener rosas en el jardín durante todo el año
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Peligros que acechan en mayo. Si en el mes de abril hablábamos de la helada tardía y de los estragos que causa en las plantaciones tempranas, durante el mes de mayo llegan los golpes de calor, que aparecen cuando, tras días benignos, húmedos y frescos, sobrevienen otros tórridos y secos. Las plantas se agostan sin remedio. El mejor consejo es escuchar al hombre del tiempo por si anuncia una subida brusca de temperaturas.
De ser así, vigila tus plantaciones, sobre todo las recientes, por si tienes que aumentar riegos y pulverizaciones de agua. Y por si esto fuera poco, numerosas plagas y enfermedades se ciernen sobre el jardín ahora que llega el calor, con los pulgones y cochinillas entre las primeras, y los hongos míldiu y el oídio entre las segundas.
De ser así, vigila tus plantaciones, sobre todo las recientes, por si tienes que aumentar riegos y pulverizaciones de agua. Y por si esto fuera poco, numerosas plagas y enfermedades se ciernen sobre el jardín ahora que llega el calor, con los pulgones y cochinillas entre las primeras, y los hongos míldiu y el oídio entre las segundas.
El círculo de la fertilidad que alcanza plenitud en mayo y que forman la unión entre el hogar y el jardín, encuentra en la máquina biotrituradora una pieza clave. Con ella, y gracias a sus motores que mueven cuchillas poderosas, los residuos pasan de ser basuras a convertirse en valiosas materias primas. Los restos vegetales, así tratados y micronizados, deben ir al silo de compost (fotografía). Si queremos que los residuos recortados por la máquina biotrituradora se transformen en valioso compost para abonar y acolchar los macizos del jardín, es preciso confinarlos durante algún tiempo en estos grandes contenedores, denominados compostadores, en los que mutan de ser basuras a rico abono. En el mercado encontrarás productos aceleradores del proceso de la fermentación.
CUÉNTANOS…
¿Cómo cuidas tu jardín en mayo? Esperamos tus comentarios
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