Decoración
Neofolk: Una visión renovada del estilo de vida tradicional en el hogar
Este concepto viene del mundo de la música, pero tiene su esencia en la reinterpretación de las raíces y en la búsqueda de la sencillez.
Se trata de un término de sobra conocido en el mundo anglosajón, ya que es una corriente que se desarrolla desde la década de los noventa en el mundo artístico. Pero el movimiento neofolk no se reduce solo a la música, sino que es un estilo de vida que aboga por la recuperación del folklore y la tradición, así como por una vuelta a las formas de vida antiguas, más sencillas y humildes. En el hogar eso se deja ver en la elección de mobiliario y objetos artesanos, con materiales naturales y sin tratar y ambientes e interiorismos de aspecto rústico, aunque actualizados. Te mostramos algunas de las claves para entender este estilo decorativo.
Hogares conectados con la naturaleza. Esta casa prefabricada y transportable del estudio español ÁBATON Arquitectura se funde con el paisaje gracias a sus grandes ventanales. Además, está fabricada con materiales respetuosos con el medio ambiente. En el interior se ha buscado ese look neofolk a través de los revestimientos de madera y el uso de materiales, como el cuero y tejidos cálidos, que recuperan técnicas artesanales, como es el caso del puf del suelo realizado en ganchillo. En el techo, unas lámparas de peltre con efecto desgastado.
Dormitorios espartanos. La célebre frase menos es más de Mies van der Rohe es también una máxima de este estilo. Ambientes sencillos y minimalistas en los que se pretende que los elementos naturales destaquen sobre el resto: luz del día y unas simples sillas de estilo rústico con asiento de anea.
Una vuelta de tuerca de lo que se conoce como rústico tradicional, ya que actualiza sus elementos convirtiéndolo en una opción contemporánea.
Una vuelta de tuerca de lo que se conoce como rústico tradicional, ya que actualiza sus elementos convirtiéndolo en una opción contemporánea.
Colores neutros y tonos que recuerdan al bosque. Las tonalidades que dominan estos ambientes son paletas de color neutras e inspiradas en el mundo natural. Por eso la madera es la reina de este estilo, ya que es un material cercano y de tonalidades cálidas. Un toque que le da un aire completamente neofolk puede ser una madera de derribo como esta en la que se evidencia el paso del tiempo.
Además, esta cocina mezcla de forma armónica elementos tradicionales como los armarios, los fuegos o las ollas de cobre, con otros más contemporáneos, como el uso de frontales de mármol blanco o el microcemento de la estructura de la cocina, que le dan un aire muy actual.
Consigue un toque rústico en tu cocina urbana
Además, esta cocina mezcla de forma armónica elementos tradicionales como los armarios, los fuegos o las ollas de cobre, con otros más contemporáneos, como el uso de frontales de mármol blanco o el microcemento de la estructura de la cocina, que le dan un aire muy actual.
Consigue un toque rústico en tu cocina urbana
Materiales francos. La madera de pino sin tratar es uno de los materiales estrella del neofolk, ya que conecta directamente con los muebles más básicos y antiguos. Lo más interesante de este tipo de maderas naturales es que se evidencian los nudos en la superficie, dando un toque cálido y muy humano.
Si es un recurso que te resulta interesante para la cocina, puedes buscar barnices neutros que pasan completamente desapercibidos y protegen las superficies adecuadamente para este tipo de espacios.
Si es un recurso que te resulta interesante para la cocina, puedes buscar barnices neutros que pasan completamente desapercibidos y protegen las superficies adecuadamente para este tipo de espacios.
Una pieza que representa un estilo. Aunque proviene del diseño escandinavo, la silla Wishbone –el clásico de Hans J. Wegner que produce Carl Hansen & Søn– reúne muchos de los valores de este estilo de vida y es un mueble que combina a la perfección en un ambiente neofolk. Materiales naturales, madera certificada, asiento de anea y formas que buscan sus referencias en la naturaleza son sus señas de identidad. Además, el proceso de su fabricación es completamente artesanal. Su diseño es tan perfecto que lleva sin modificarse más de 60 años.
Conoce la historia de este mueble clásico
Conoce la historia de este mueble clásico
La memoria de los objetos. El peltre es una aleación de diferentes metales que se suele recubrir con una capa de esmalte cerámico para hacerlo resistente al agua. Fue un material muy popular en casas de todo el mundo durante los siglos XVIII y XIX, ya que era muy maleable y permitía moldear todo tipo de utensilios de cocina y baño.
El estilo neofolk recupera alguno de estos útiles, como estos lavabos de peltre que remiten a una forma tradicional del uso del baño. Una reflexión sobre nuestros hábitos y rutinas diarias que reivindica una forma más pausada de vivir el espacio.
El estilo neofolk recupera alguno de estos útiles, como estos lavabos de peltre que remiten a una forma tradicional del uso del baño. Una reflexión sobre nuestros hábitos y rutinas diarias que reivindica una forma más pausada de vivir el espacio.
Interiores improvisados. Lo que se busca con este tipo de estilo es crear un espacio que parezca fruto del paso de los años más que una estancia preparada para la foto. Por un lado, los muebles desgastados y con efectos decapados y los revestimientos de madera reutilizados son el toque adecuado para crear la ilusión de casa con muchos años a sus espaldas.
Pero también los pequeños objetos decorativos de diferente origen le dan un carácter único y muy personal al ambiente. El objetivo siempre es el mismo: crear un hogar vivido, práctico y muy acogedor.
Pero también los pequeños objetos decorativos de diferente origen le dan un carácter único y muy personal al ambiente. El objetivo siempre es el mismo: crear un hogar vivido, práctico y muy acogedor.
Recuperar los clásicos. Por ejemplo, los azulejos tipo metro con material de juntas en color negro son un recurso muy utilizado. Se trata de un modelo popular y con historia. También es una forma de conectar con el estilo de las cocinas más tradicionales en las que esta estancia era el corazón indiscutible de la casa. Si lo completas con unas baldas de madera y unas cuantas plantas conseguirás ese ambiente rústico dentro de una casa urbana.
Azulejos metro: El revestimiento que nunca se pasa de moda
¿Y TÚ?
¿Has recreado un estilo neofolk en tu casa? Cuéntanos qué trucos has utilizado. Sube una foto en los comentarios para que podamos verlo.
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