¿Dónde está la cocina? Trucos para esconderla y ganar en amplitud
Una cocina oculta es la solución ideal para espacios de reducidas dimensiones, donde cada maniobra para conseguir espaciosidad es crucial.
Son invisibles, pero están totalmente equipadas y diseñadas al detalle con la máxima funcionalidad. En un armario, como columnas exentas, con módulos independientes móviles o puertas correderas, las cocinas ocultas nos permiten mantener todo en orden, con todo lo necesario a mano y aprovechando al máximo el espacio en viviendas pequeñas. También pueden servir como segunda cocina en el porche o en una sala polivalente. Sea cual sea el uso que se les dé, estas propuestas nos ayudarán a crear una práctica, integrada y completa.
Mini cocina tras una persiana. En apartamentos muy pequeños o estudios de reducidas dimensiones la cocina suele estar proporcionada con respecto a los metros. Así que si se trata de una composición mínima, es recomendable optar por ocultarla tras un cerramiento de persiana vertical.
Esto resulta muy útil para aligerar visualmente un espacio de manera que aunque sea pequeño parezca más grande, ya que cuanto más limpio está y menos aparatos, utensilios o libros quedan a la vista, más sensación de amplitud transmite todo el ambiente en conjunto. También se puede optar por ocultar tras la persiana solo una parte, la que contamina más visualmente, como en este caso se ha hecho con la zona de cocción y de trabajo.
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Esto resulta muy útil para aligerar visualmente un espacio de manera que aunque sea pequeño parezca más grande, ya que cuanto más limpio está y menos aparatos, utensilios o libros quedan a la vista, más sensación de amplitud transmite todo el ambiente en conjunto. También se puede optar por ocultar tras la persiana solo una parte, la que contamina más visualmente, como en este caso se ha hecho con la zona de cocción y de trabajo.
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Estructura con puertas basculantes. Son una de las opciones más atractivas para ocultar una cocina. En este proyecto, un revestimiento de plancha de acero corten sirve de frontal para esta cocina de estilo industrial integrada en un ambiente rústico. La pieza superior se abre mediante un motor para dejar al descubierto la zona de trabajo, aguas y cocción. Cuando está cerrada, parece un decorativo muro de textura oxidada. Es un diseño de la firma alemana Warendorf.
Más imágenes de esta cocina
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Oculta tras puertas abatibles. Eligiendo unas del mismo color que las paredes, podremos crear un espacio que pase totalmente desapercibido. Cuando las puertas están cerradas, es una opción que libera un amplio espacio para dedicarlo a otro uso diferente, como zona de descanso para estar en familia, leer, charlar con los amigos… Al abrir las puertas, el ambiente se transforma en una gran cocina. Gracias a la ausencia de tiradores en las puertas, se genera un efecto de integración total. Eso sí, es una opción que requiere algo de espacio alrededor para poder abrirlas.
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Parcialmente escondida. En lugar de ocultarla al completo, también se puede aplicar a una parte muy concreta de la cocina, como la zona de despensa, un espacio que es difícil mantener en orden. En este caso, se ha equipado con una encimera interior que aporta una superficie extra de trabajo para cocinar.
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Con puertas correderas. Como si se tratara de un armario, esta cocina totalmente equipada se esconde tras una puerta corredera. Al abrirla se puede cocinar con total comodidad. En estos casos es necesario dejar distancia suficiente entre el mobiliario de la cocina y la pared para poder trabajar de manera confortable.
Isla a la vista. Otra idea es ocultar únicamente los electrodomésticos, la despensa y la zona almacenaje, para dejar a la vista solamente la isla con el fregadero y la zona de trabajo. Asegúrate de que se trata de puertas correderas que se deslizan suavemente, si no su uso no será nada práctico. Este diseño es de la firma Elmar Cucine.
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En columnas y módulos independientes. Es una de las últimas propuestas de la firma de cocinas italianas Dada, el modelo Tìvali diseñado por Dante Bonuccelli, que se compone de módulos independientes que pueden ser ubicados en cualquier zona de la casa. Son muebles de carácter muy vanguardista, perfectos para generar fluidez en espacios diáfanos. Existen diferentes tipos de módulos y columnas independientes por lo que es un programa que permite diseñar una cocina fácilmente según nuestros gustos y necesidades.
Cocina integrada. Esta cocina se encuentra bajo un arco que funciona como librería o zona de almacenaje, casi más propia de un salón que de una cocina. El horno, la zona de cocción, los cajones para los utensilios y la zona de despensa, quedan totalmente organizados tras unas puertas correderas.
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Encimera encubierta. Otra opción es ocultar únicamente la zona de cocción y/o de aguas mediante una tapa que o bien sube y baja, o bien se puede desplazar a un lado para descubrir los fuegos, el fregadero, o ambos, según la necesidad. Cuando oculta la zona de trabajo, la encimera se convierte un espacio liso que no parece una cocina.
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¿Tienes una cocina oculta en casa? Sube una foto en los comentarios para que podamos verla.
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