Hora de reciclar: Sugerencias para que tu cocina sea aún más ecológica
Contenedores clasificadores de residuos e ingeniosas soluciones para reducir (y reutilizar) desechos orgánicos.
Los actuales hábitos de vida y consumo producen una gran cantidad de envases y desechos de costosa gestión y, en ocasiones, influyen de manera notable en la destrucción de materiales naturales. El ya clásico lema de las tres erres (reducir, reutilizar, reciclar) resulta vital al hacer una gestión sostenible de los residuos domésticos, que debería empezar por elegir productos con los menores envoltorios posibles, usar bolsas reutilizables en lugar de las desechables de plástico y limitar los productos de usar y tirar en favor de otros más permanentes. En este artículo nos centraremos en la tercera “R” para mostrarte formas eficaces, cómodas y prácticas de reciclar restos de todo tipo.
¿Sabías que al reciclar una tonelada de papel se salvan 17 árboles? ¿O que reciclando una lata de aluminio se ahorra la energía suficiente para hacer funcionar un televisor 3,5 horas? Éstas y otras muchas cuestiones dejan clara la necesidad de reciclar los residuos domésticos, sobre todo si tenemos en cuenta que se estima que estos son de alrededor de 1 kg por persona y día. Separar los residuos y dar a cada uno el tratamiento adecuado es la clave para realizar un correcto reciclaje desde casa.
Son muchos los sistemas de clasificación de residuos existentes en el mercado. El primer paso antes de elgir es determinar el espacio disponible para ello y decidir su ubicación. Una de las opciones más habituales, por su comodidad, es incluir los sistemas de reciclaje bajo el fregadero. Según el emplazamiento, habrá que analizar qué tipo de apertura es la más adecuada. Los frentes extraíbles, como los de la imagen, son una de las opciones más prácticas.
En el caso de una cocina ya existente, hay módulos para instalar en el interior del mobiliario que no afectan a los frentes. Así, pueden colocarse en armarios con puertas batientes convencionales, mediante mecanismos que permiten un acceso fácil a ellos. Éste es de la firma Blanco.
11 cabeceros sorprendentes hechos con objetos reciclados
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Los mecanismos giratorios, como éste de Franke, son una de las opciones tradicionalmente más empleadas, ya que permiten un acceso total a los contenedores con un simple movimiento. Para hacerlos aún más cómodos, algunas firmas ofrecen complementos como el accionamiento de la apertura de la puerta del armario con el pie.
La gran variedad de contenedores interiores permiten crear composiciones totalmente personalizadas, que se adaptan tanto al espacio disponible como a nuestras necesidades concretas de reciclaje. Antes de elegirlo, convendrá analizar dichas necesidades cotidianas y ver a qué categorías destinamos más espacio.
Un acceso directo integrado en la encimera, como el que propone la firma Blanco con su modelo Solon, resulta muy cómodo para eliminar las pieles y los restos de alimentos que se producen durante la preparación de las comidas, sin necesidad de abrir armarios. E igual de cómodo es su vaciado, ya que cuentan con depósitos extraíbles para transportarlos con comodidad cuando se desee.
La mejor ubicación para este tipo de contenedores es en la encimera de trabajo y, preferiblemente, próximos al fregadero, sobre todo si éste cuenta con escurridores y tablas de corte integrados.
La mejor ubicación para este tipo de contenedores es en la encimera de trabajo y, preferiblemente, próximos al fregadero, sobre todo si éste cuenta con escurridores y tablas de corte integrados.
Aunque no son muy habituales en nuestro país, los trituradores de alimentos son una opción muy práctica para la eliminación de residuos orgánicos de pequeñas dimensiones. Franke cuenta con una completa oferta, englobada en su gama Fragmenta. Una propuesta de fácil empleo y con un mecanismo que apenas ocupa espacio bajo el fregadero.
Los restos de comida son totalmente biodegradables, pero pocas personas los reciclan. Y es que, tener un compostador tradicional en un piso puede resultar complicado por cuestiones de espacio. No obstante, existen versiones domésticas como el ingenioso NatureMill Compost Bin, un compostador automático que, por sus reducidas dimensiones, puede colocarse en cualquier parte, incluso bajo el fregadero. Con un solo botón y un consumo eléctrico muy bajo, es capaz de reciclar hasta 55 kg de residuos al mes, que convierte en compost cada diez días de forma muy simple: los residuos se introducen en la cámara superior, donde mediante aire caliente y humedad se genera el compost que pasa a través de una trampilla a la bandeja de solidificación inferior. De esta manera se pueden ir agregando elementos nuevos a la cámara de arriba. La máquina se vacía una vez cada tres semanas y el producto resultante puede utilizarse para añadir a las macetas o cultivar nuestro propio huerto orgánico. El distribuidor en España de NatureMill es Comei.
En viviendas con jardín, una opción cada vez más popular para la gestión de los residuos orgánicos es transformarlos en compost. Para ello, existe una amplia gama de compostadores domésticos muy utiles, por ejemplo, para el enriquecimiento de los suelos. Los más habituales están fabricados en plástico para aislar la materia orgánica del sol y la lluvia y mantenerse inalterables a la intemperie, y se componen de dos contenedores: el superior, por el que se introducen los residuos, y el inferior, en el que se almacena el compost.
Si bien la cocina es la estancia más habitual para llevar a cabo la separación de los residuos, porque es uno de los espacios en los que más se generan, existe una amplia variedad de soluciones para adaptarse a cualquier ambiente disponible. Un buen ejemplo son las columnas de reciclaje que aprovechan los huecos en altura, muchas de ellas con una estética depurada que permite integrarlas en cualquier rincón.
Cocinas ecológicas: Todo sobre muebles sostenibles y saludables
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Berna
El empleo de los colores acordados para identificar cada uno de los residuos (verde para el vidrio, azul para el papel y amarillo para el plástico) facilita el uso de los clasificadores de residuos por parte de todos los miembros de la familia, incluidos los más pequeños. Si dispones de un espacio aislado para colocarlos, ya sea un lavadero amplio, un patio o un rincón en el garaje, decídete por contenedores de grandes dimensiones.
Y TÚ…
¿Eres de los que reciclas en casa? Cuéntanos tus trucos para gestionar los residuos en la sección de comentarios.
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