Adereza tu cocina con un toque de estilo 'vintage'
Las antigüedades y objetos 'vintage' tienen un encanto que los hace perfectos para dar personalidad a tu cocina.
Atrévete a mezclar electrodomésticos y accesorios modernos con piezas vintage para transformar tu cocina en una estancia con personalidad. Dejará de ser un mero espacio funcional y te invitará a vivirla. Los objetos vintage y las antigüedades no solo suelen presentar una cuidada factura (si han sobrevivido tanto tiempo, es que están hechos para durar), sino que aportan encanto e integridad garantizados. Todo vale: desde mobiliario y elementos de iluminación hasta vasijas de aire retro o asientos extravagantes que crearán una atmósfera singular, auténtica y personal.
Dale un aire francés. Los franceses tienen una sensibilidad especial para la ornamentación vintage y este toque rústico típicamente galo funcionaría igual de bien en una cocina española. Si tus techos no son tan altos, conservarás la misma esencia con una sensación un poco más acogedora.
En lugar de los clásicos rústicos a los que estamos acostumbrados —las telas de algodón a cuadros, los armarios y alacenas de madera o los tonos mantequilla—, elige colores blancos y neutros más fríos para conseguir un fondo pálido y elegante. La pintura con un acabado desgastado contribuye a dar a las piezas ese efecto de objetos de anticuario y ayuda a fusionar lo nuevo con lo viejo. Una baldosa hidráulica para el suelo potencia asimismo un sabor añejo, al igual que optar por piezas de mobiliario independientes en lugar de por una cocina integrada.
Completa el conjunto con un asiento de segunda mano, lámparas de estilo industrial, un antiguo tajo de carnicero, cacerolas de cobre y un buen surtido de tablas de cortar.
Cerámico que imita hidráulico: El revestimiento versátil que está de moda
En lugar de los clásicos rústicos a los que estamos acostumbrados —las telas de algodón a cuadros, los armarios y alacenas de madera o los tonos mantequilla—, elige colores blancos y neutros más fríos para conseguir un fondo pálido y elegante. La pintura con un acabado desgastado contribuye a dar a las piezas ese efecto de objetos de anticuario y ayuda a fusionar lo nuevo con lo viejo. Una baldosa hidráulica para el suelo potencia asimismo un sabor añejo, al igual que optar por piezas de mobiliario independientes en lugar de por una cocina integrada.
Completa el conjunto con un asiento de segunda mano, lámparas de estilo industrial, un antiguo tajo de carnicero, cacerolas de cobre y un buen surtido de tablas de cortar.
Cerámico que imita hidráulico: El revestimiento versátil que está de moda
La mesa de cocina. Los bancos de trabajo industriales antiguos o las mesas de las queserías tradicionales pueden convertirse en un maravilloso mueble de cocina, especialmente en grandes espacios diáfanos o en las casas con mucho ajetreo a la hora de las comidas. Búscalos a través de anticuarios, mercadillos o en subastas por internet.
Tan sólo recuerda una cosa muy importante: mide su altura. No suelen haber sido diseñados para sentarse a su alrededor, por lo que es probable que unas sillas de comedor resulten demasiado bajas. En tal caso, a lo mejor puedes cortar las patas o conjuntarla con taburetes de altura regulable. Si son altas y no las quieres modificar, quizá te sirva mejor como superficie de trabajo adicional o isla.
Tan sólo recuerda una cosa muy importante: mide su altura. No suelen haber sido diseñados para sentarse a su alrededor, por lo que es probable que unas sillas de comedor resulten demasiado bajas. En tal caso, a lo mejor puedes cortar las patas o conjuntarla con taburetes de altura regulable. Si son altas y no las quieres modificar, quizá te sirva mejor como superficie de trabajo adicional o isla.
Recupera y reutiliza. Si te gusta pasear por los rastros y recorrer las tiendas vintage, seguro que disfrutas rescatando objetos singulares que, reconvertidos con ingenio, podrán aportar una importante personalidad a tu cocina. Recurre siempre a tu creatividad. Plantéate el suprarreciclaje y dale una nueva vida a los objetos viejos.
En este comedor, una pieza de madera recuperada se ha transformado en un original botellero que además de resultar útil como elemento de almacenaje de cocina, también presenta un gran atractivo por su particular estética.
En este comedor, una pieza de madera recuperada se ha transformado en un original botellero que además de resultar útil como elemento de almacenaje de cocina, también presenta un gran atractivo por su particular estética.
Un guiño a los años de escuela. Da un giro a una cocina de diseño industrial con mobiliario escolar vintage. Estas sillas de pupitre originales potencian la personalidad de este espacio, en especial si se complementan con una mesa de madera tan bien conservada como esta, aunque también sumarían calidez a un diseño moderno. Son apilables, por lo que se pueden guardar una encima de otra en una esquina cuando no se utilizan.
Con lámparas industriales, una pared de ladrillo y otra de azulejo tipo metro como contraste, conseguirás un interior enérgico, potente y nada convencional.
Por qué apostar por un muro de ladrillo visto
Con lámparas industriales, una pared de ladrillo y otra de azulejo tipo metro como contraste, conseguirás un interior enérgico, potente y nada convencional.
Por qué apostar por un muro de ladrillo visto
Combina modernidad y nostalgia. Los frigoríficos retro son ideales para que las cocinas modernas y despejadas vibren con un toque vintage sin necesidad de optar por una antigüedad (a fin de cuentas, no todos tenemos esa pasión).
Elige el estallido de luminosidad que aporta un naranja mandarina o un amarillo brillante para evocar los años sesenta y deja que tu elección de color determine el grado de nostalgia del espacio. Complementa el mobiliario con toques gráficos contemporáneos para equilibrar.
Elige el estallido de luminosidad que aporta un naranja mandarina o un amarillo brillante para evocar los años sesenta y deja que tu elección de color determine el grado de nostalgia del espacio. Complementa el mobiliario con toques gráficos contemporáneos para equilibrar.
El cóctel perfecto. Las cocinas integradas actuales causan a veces una sensación de lugar esterilizado, perfecto, casi de exposición, sin la menor personalidad y originalidad. Contrasta lo viejo con lo nuevo, añadiendo un elemento de almacenamiento vintage: un armario, una consola o un aparador. Es una forma muy efectiva de añadir calidez, solo tienes que asegurarte de que la pieza te sea realmente útil, bien como espacio de almacenamiento o como otra encimera más.
Otra manera de hacerlas ganar en calidez es mediante la inclusión de una lámpara que por estilo sería más propia de un salón, precisamente por eso hacen que la cocina resulte más acogedora. Escoge o adapta una que case perfectamente con la paleta de colores y materiales que has elegido para tu cocina. Su luz íntima y agradable aportará más gracia a la estancia.
Otra manera de hacerlas ganar en calidez es mediante la inclusión de una lámpara que por estilo sería más propia de un salón, precisamente por eso hacen que la cocina resulte más acogedora. Escoge o adapta una que case perfectamente con la paleta de colores y materiales que has elegido para tu cocina. Su luz íntima y agradable aportará más gracia a la estancia.
Utensilios antiguos. Los enseres de cocina vintage tienden a caracterizarse por su solidez, por estar bien hechos y por la belleza de su diseño; ofrecen una sensación de autenticidad propia de las casas de época. Hazte con utensilios como balanzas, recipientes esmaltados o los clásicos botes de cristal herméticos para que el encanto de antaño inunde tu cocina.
Quizá no sirvan para desempeñar su función original —un peso antiguo puede que no sea muy fiable—, pero búscales otro uso: ¿Qué nueva utilidad podrías darles? La báscula de la imagen está pidiendo a gritos un montoncito de manzanas.
Busca también azulejos antiguos. Incluso aunque encuentres solo uno o dos, decorados con dibujos diferentes, puedes componer un mosaico que te sirva para apartar la cafetera caliente del fuego o apoyar la cuchara de madera mientras cocinas.
Quizá no sirvan para desempeñar su función original —un peso antiguo puede que no sea muy fiable—, pero búscales otro uso: ¿Qué nueva utilidad podrías darles? La báscula de la imagen está pidiendo a gritos un montoncito de manzanas.
Busca también azulejos antiguos. Incluso aunque encuentres solo uno o dos, decorados con dibujos diferentes, puedes componer un mosaico que te sirva para apartar la cafetera caliente del fuego o apoyar la cuchara de madera mientras cocinas.
Sencillo y elegante. Algunas cocinas de estilo rústico parecen emanar un encanto vintage natural. Para dotar de esa atmósfera fina y sutil a tu cocina, usa para el mobiliario tonos envejecidos de blanco, colores neutros y grises suaves, en lugar de maderas sin tratar, que parecerán más nuevas.
Cocina de la semana: Industrial, rústica y contemporánea, todo en uno
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Introduce señales. Una placa original de señalización esmaltada de grandes dimensiones como esta siempre resulta una confirmación de estilo en una cocina. Si está despintada o desgastada, mejor que mejor. Si puedes, en lugar de hacerte con una reproducción, invierte en una original ya que causan una impresión mucho más auténtica, especialmente en tamaños tan llamativos.
CUÉNTANOS…
¿Qué detalles vintage tienes en tu cocina? Sube una foto en los comentarios.
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Acompáñalo de algún otro toque para que quede más homogéneo, una pieza clásica de mediados de siglo como este sofá de Ercol de la imagen, tapizado a juego con los armarios de la pared opuesta, que parece haber encontrado su lugar ideal en esta espaciosa cocina estilo almacén.