En el centro de las ciudades hay verdaderas joyas con un potencial enorme para reformar. Orientación y espacio, abrir la vivienda a la luz natural y ordenar los espacios a nuestro proyecto de vida... con mobiliario de calidad personalizado.

No se si ya tiene resultó su dilema, pero si aun lo tiene pendiente, podría mezclar con muebles de cristal y mármol, así le aporta frescura. Cambiar cortinas, tejido de sillas y sofás, con tonos neutros para homogeneizar el ambiente, dar unos toques de color con cojines decorativos y algún cuadro.

Hola! ahí muchas ,referencias para decorar terrazas. La decoración depende de tus aportaciones sobre o detalles de la terraza. Por ejemplo esta en alto ósea, un piso ,ático ,planta baja, cubierta o descubierta. Eso influencia bastante para poner ,que estilo de muebles. Te aporto algunas imagen, como te dije hasta que no se aclare las característica , de la terraza lo hace difícil que los compañeros te puedan ayuda de forma mas acertada.

Buenos días MAR: Mi aversión al TABURETE, es un poco de postureo. Realmente me da lo mismo, que a la gente les gusten, pero si puedo decirte, que he recopilado fotos de cientos de diseños y no salvo apenas ninguno. Si tienes tiempo, busca aquí algunos de mis comentarios sobre ellos, así como sobre "cheslones" e islas y penínsulas de cocinas. Seguro que te diviertes. Un dato que apoya mi opinión, es lo mal que conviven unos taburetes con unas sillas al lado. Poner tapas a 75 cm, permitiría compartir el mismo tipo de asiento. El taburete es una malformación derivada de una deformación de una silla. Si no, se llama "banquetaª. Los invitados se sientan en lo que hay. Si pones sillas, no creo que las rechacen y permanezcan de pié. ¿Sabes el origen del taburete? Pués eso. En España no solia haberlos, antes de los años 50. Son una influencia norteamericana y tienen malas connotaciones antiéticas. Los clubs de carretera, llamados eufemísticamente "de alterne", están llenos de estos asientos, con dos por metro. Como no es habitual que los frecuenten señoras, no sienten rechazo por ellos. Sirven para medir la fidelidad de un hombre, con sólo apreciar la soltura con que los use. Pido perdón por la claridad expositiva, ajena al tema del sitio. No volveré a manifestarme.