Visita privada: El hogar sencillo de dos artistas en el Eixample
De un vistazo
Quién vive aquí: El ilustrador Miguel Gallardo y su pareja, Karin du Croo. Eventualmente les visita la hija de Gallardo, María.
Situación: Eixample, Barcelona.
Superficie: 90 metros cuadrados. 4 habitaciones con distintos usos: dormitorio, vestidor, despacho y trastero.
Dato curioso: En el piso hay algunos tabiques tirados y se ven las marcas en el suelo, por ejemplo en el salón-comedor y la cocina. Sin embargo han preferido dejarlo tal cual en lugar de tener que cambiar el pavimento.
Un interesante detalle de la vivienda es que conserva los ventanales originales en madera trabajada y pintada con contraventanas que ocultan por completo la luz. Para matizar la entrada de los rayos solares también hay persianas de madera. Como detalle, este Cobi, diseño de Javier Mariscal y un equipo de colaboradores entre los que se encontraba Gallardo. Este perro cubista sumó en sus filas a defensores y detractores, pero de lo que no hay duda es que su diseño de vanguardia lo convirtió en la mascota más icónicas que jamás hayan tenido unos Juegos Olímpicos.
En el área de comedor se disponen tres estanterías en forma de “U”, aunque les haría falta espacio para acumular todos los volúmenes que tienen. Así que estos dos apasionados por la literatura incluso tienen más librerías en el pasillo y, por supuesto, en el despacho donde trabaja él. Sin saberlo, han conformado un comedor muy a la moda, gracias a que se mezclan sin complejos sillas muy diferentes.¿Sillas de comedor a juego? Atrévete a combinar modelos
En esta casa reina la luz y la simplicidad formal. El salón-comedor es un espacio inmenso y ecléctico de líneas rectas, con piezas que les han regalado (la mesa de centro) o atesoran por herencia familiar, como es el caso de la alfombra, que lleva décadas con ellos. El sofá-cama (de Ikea) sí que es de reciente adquisición. Lo necesitan para cuando les visita María: la hija de Gallardo. María tiene autismo y es protagonista del libro y posterior documental ‘María y yo’, así como de la más reciente obra ‘María cumple 20 años’. Ella no tiene una habitación propia porque prefiere dormir en un espacio más abierto.Miguel y Karin vivían antes en un piso en Ciutat Vella, con más ruidos y menos luz. De allí los echaron porque querían hacer pisos turísticos. Pero ahora, en esta nueva vivienda en el Eixample, están convencidos de que han ganado con el cambio. Quizá, lo primero que llama la atención en la casa es la sorpresa que produce ver las paredes completamente desnudas. “Al principio nos costó adaptarnos, porque en nuestro anterior piso teníamos cuadros e ilustraciones por todas las estancias. Sin embargo, ahora agradecemos la sobriedad. Antes los espacios quedaban muy recargados”, confi...
Esta nevera, situada en el salón-comedor, pertenecía a la abuela materna de Karin, que era holandesa. Ahora, aunque ya no funciona, sirve para almacenar mantelería y algún plaid. “Rescaté el frigorífico hace 20 años atrás y lo llevo a mis pisos siempre”, cuenta Karin orgullosa. El reloj dorado es asimismo una reliquia antigua.
La cocina se abrió al pasillo para que la estancia resultase más amplia y se viera más desahogada. Aquí, una pieza muy especial es protagonista del espacio: una mesa hexagonal de madera que integra colgadores para sartenes y ollas. “Al principio la mesa iba a ser tipo barra, aunque finalmente decidimos bajarla un poco porque así está a la altura óptima como superficie de trabajo”, comenta Gallardo.
Este es el boceto de la mesa de office de la imagen de arriba que el estudio Maio diseñó a medida para Karin y Gallardo. Este estudio de arquitectura también les asesoró con las reformas parciales ejecutadas. Por ejemplo, la bañera se tuvo que sustituir por un plato de ducha para facilitar el acceso para María, la hija de él.
El dormitorio es de dimensiones reducidas, así que no se recargó con muchos elementos, las mesillas de noche. Las lamparitas, la cama, las alfombras y un par de asientos extra fue todo el mobiliario que instalaron. Una habitación contigua hace las veces de vestidor. La ropa de cama es antigua y de hilo.
El escritorio y la lámpara son dos piezas de época que atesoran de herencia familiar. El escritorio ahora hace las veces de mueble de recibidor donde dejar la correspondencia y las llaves. También hace de expositor de los premios acumulados por Gallardo a lo largo de su carrera.Respecto a la lámpara de lágrimas, aunque él ha confiado todo el diseño de la casa a su pareja, no veía claro que ese fuera su lugar adecuado. Sin embargo ahora le encanta cómo queda dando una cálida la bienvenida al hogar. El resto de luminarias del piso fueron adquiridas, en su mayoría, en los Encants Vells: un mercado que tienen a pocos pasos de casa.Descubre cómo elegir con criterio una antigüedad
Entre archivadores, libros y cómics encontramos un rincón muy kitsch en el que Gallardo muestra su colección particular de Naranjito. Aunque él no es el autor de la mascota, sí lo es de su edición Naranjito is Back in Black. Un amigo encontró los moldes en una fábrica abandonada y decidieron producir una pequeña cantidad de ellos.
Actualmente, Gallardo está trabajando en la señalización de un centro educativo para niños y niñas con necesidades especiales. El despacho se encuentra en un ala del piso completamente en el extremo opuesto de la zona de día. Así que le resulta fácil aislarse y trabajar aunque haya una reunión social en casa. Junto a él, en perpendicular, se ha habilitado una zona de trabajo para Silvia: su colaboradora.
“¡No puedo pasar un día sin dibujar!”, dice efusivamente Gallardo. Se pueden seguir todas las ilustraciones que hace a diario en su página de Facebook.
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