Visita privada: Una casa en Japón diseñada para la felicidad
Los Horii son directores artísticos y han creado un espacio diáfano –¡y con una terraza gigante!– donde descansar mente y cuerpo.
El área Hokusetsu, en Osaka, es muy popular entre las familias japonesas, debido a un exuberante entorno natural, de fácil acceso y cerca del centro. Aquí encontramos el hogar de Hirochika Horii, su esposa y su hija (con ellos también vive la madre de la señora Horii). Tras vivir un tiempo en un apartamento, decidieron buscar una casa más grande para que la abuela pudiera vivir con ellos. Se decantaron por Hokusetsu, cerca de tren bala al Shinkansen y del aeropuerto, que a menudo utilizan para sus viajes de negocios. “Nos gusta la idea de un hogar donde pueda reunirse la familia, los amigos… ¡y todo el mundo!”, dicen. Con esta máxima en mente trabajaron con la agencia Hashimoto Kenji Arquitectura y Diseño. Todos se implicaron al máximo en el proyecto; especialmente la pareja. ¡Hasta contamos los platos de la vajilla para definir qué estantes eran los mejores para la cocina! ”, reconoce Hirochika entre risas.
El objetivo es mantener la unidad familiar, compartiendo espacio y tiempo juntos. Con la idea de no tener habitaciones donde encerrarse, le dieron muchas vueltas a dónde y cómo almacenar los libros de trabajo. Con el tiempo, pusieron estanterías en un altillo.
Esto les motivó para diseñar un espacio de trabajo más o menos independiente. Al abrir el lado superior de la pared, la sala de estar puede verse desde la oficina, que no está cerrada, de manera que las conversaciones y charlas de abajo se escuchan arriba. ¿Desventajas? Sólo una: ruidos y voces llegan hasta el dormitorio principal… Hirochika a veces se pregunta, si este plan de vida abierta, no es ahora demasiado extremo. Hay dos escaleras para subir hasta la oficina: en la sala de estar y en la cocina.
Espacios de planta abierta: ¿Fin de una era o una moda que va a perdurar?
Esto les motivó para diseñar un espacio de trabajo más o menos independiente. Al abrir el lado superior de la pared, la sala de estar puede verse desde la oficina, que no está cerrada, de manera que las conversaciones y charlas de abajo se escuchan arriba. ¿Desventajas? Sólo una: ruidos y voces llegan hasta el dormitorio principal… Hirochika a veces se pregunta, si este plan de vida abierta, no es ahora demasiado extremo. Hay dos escaleras para subir hasta la oficina: en la sala de estar y en la cocina.
Espacios de planta abierta: ¿Fin de una era o una moda que va a perdurar?
En las estanterías encontramos libros, tebeos de anime japoneses, una vieja enciclopedia, pero también obras de arte y otros objetos.
Los Horii están especialmente contentos con la espaciosa terraza exterior, de 5x5 metros y contigua a la sala de estar. Fue diseñada para que familia, amigos y huéspedes se reúnan.
Los cojines se guardan los días de lluvia, pero el sofá está diseñado con un material resistente a la intemperie. En el centro, vemos una sombrilla y una mesa diseñados por el mismo Hirochika.
Durante el verano, ponen una piscina para los niños y disfrutan del sol todos juntos.
Estilos del mundo: 11 terrazas que parecen sacadas de una postal
Los cojines se guardan los días de lluvia, pero el sofá está diseñado con un material resistente a la intemperie. En el centro, vemos una sombrilla y una mesa diseñados por el mismo Hirochika.
Durante el verano, ponen una piscina para los niños y disfrutan del sol todos juntos.
Estilos del mundo: 11 terrazas que parecen sacadas de una postal
A la pareja le gusta celebrar fiestas con compañeros de trabajo y amigos. Se reúnen en la terraza. A veces, los invitados traen comida; otras, cocinan todos juntos: distintas generaciones disfrutando a la vez de un estupendo –y muy grande– espacio al aire libre. Las sonrisas que vemos en esta foto, son la mejor prueba de ello.
En verano, durante la celebración del Tanabata –evento cultural de tradición japonesa–, cuelgan tiras de papel de colores y piden deseos a las estrellas fugaces; en otoño, para celebrar el Otsukimi, cenan todos juntos bajo una luna llena que se ve tan cerca, que casi parece que pudiera tocarse.
En verano, durante la celebración del Tanabata –evento cultural de tradición japonesa–, cuelgan tiras de papel de colores y piden deseos a las estrellas fugaces; en otoño, para celebrar el Otsukimi, cenan todos juntos bajo una luna llena que se ve tan cerca, que casi parece que pudiera tocarse.
En la gran sala de estar –48 metros cuadrados– también se dan clases de yoga, impartidas por un amigo de la familia.
Gracias a una puerta corredera que deja abierta la terraza, la sesión de ejercicios y posturas se disfruta mientras la brisa entra a través del ventanal. En verano, la habitación se refresca con aire acondicionado.
Los días son más agradables y productivos con esta disposición abierta, cuentan.
Guía para decorar con paneles shoji
Gracias a una puerta corredera que deja abierta la terraza, la sesión de ejercicios y posturas se disfruta mientras la brisa entra a través del ventanal. En verano, la habitación se refresca con aire acondicionado.
Los días son más agradables y productivos con esta disposición abierta, cuentan.
Guía para decorar con paneles shoji
La cocina es el espacio ideal para que la familia dé rienda suelta a su pasión por la gastronomía tradicional.
Hirochika ideó la disposición de los muebles y estantes de cocina en la pared trasera. Separó todos los platos, cuencos, tazas y fuentes, y los contó. Luego los apiló juntos, con el fin de obtener mediciones precisas. Sólo entonces, y junto a la señora Horii, diseñaron armarios y estanterías.
La basura doméstica se separa en varias categorías: residuos combustibles, plásticos y reciclables.
Hirochika ideó la disposición de los muebles y estantes de cocina en la pared trasera. Separó todos los platos, cuencos, tazas y fuentes, y los contó. Luego los apiló juntos, con el fin de obtener mediciones precisas. Sólo entonces, y junto a la señora Horii, diseñaron armarios y estanterías.
La basura doméstica se separa en varias categorías: residuos combustibles, plásticos y reciclables.
El tamaño estándar de una encimera con un fregadero incorporado es de, aproximadamente, 250 cm de largo y entre 60 y 65 cm de ancho. En este caso, la pareja se decidió por una muy amplia, de 300 x 105 cm junto, y con un grifo muy concreto que les gustó.
La encimera extralarga permite que la señora Horii y sus amigos monten cursos de panadería aquí. De hecho, la encimera es tan grande, que cada participante tiene espacio para el amasado individual.
El espacio entre la encimera y los estantes traseros está pensado para que nadie se estorbe al cocinar –los 110 cm son casi el doble del promedio, de 60 a 75 cm. Hablamos de una cocina pensada y diseñada para disfrutar y compartir en compañía de muchos.
El espacio entre la encimera y los estantes traseros está pensado para que nadie se estorbe al cocinar –los 110 cm son casi el doble del promedio, de 60 a 75 cm. Hablamos de una cocina pensada y diseñada para disfrutar y compartir en compañía de muchos.
La lámpara con forma de casco sobre la mesa de comedor parece normal… a primera vista. Si la miramos con detenimiento, vemos una carpa roja dibujada dentro.
Los elementos de iluminación de IDÉE, de formas ligeras y redondeadas, fueron elegidos con el objetivo de mantener el ánimo siempre alegre.
Los elementos de iluminación de IDÉE, de formas ligeras y redondeadas, fueron elegidos con el objetivo de mantener el ánimo siempre alegre.
La imagen pulcra del lavabo y de las paredes del baño acentúa el lado sanitario de la estancia. El espejo sobre el lavabo tiene tres puertas, que vienen muy bien cuando uno se está vistiendo y preparando para empezar el día.
En el interior del espejo hay espacio para todo: la zona del lavabo queda despejada. La pequeña silla roja tiene una función decorativa y práctica al mismo tiempo.
En el interior del espejo hay espacio para todo: la zona del lavabo queda despejada. La pequeña silla roja tiene una función decorativa y práctica al mismo tiempo.
La lavadora se esconde detrás de la puerta corrediza, justo al lado del baño. A la pareja se le ocurrió que, después de lavar la ropa, ésta se colocase en perchas. Luego, una vez lista, se saca todo fuera para secar.
En un hogar típico de Japón, a menudo, se puede ver ropa colgando en el segundo piso. Sin embargo, al situar el cuarto de la colada y las barras colgantes en el primer piso, la tarea de lavado lleva menos tiempo y es más cómodo para la abuela, que es quien suele encargarse de esta tarea.
En un hogar típico de Japón, a menudo, se puede ver ropa colgando en el segundo piso. Sin embargo, al situar el cuarto de la colada y las barras colgantes en el primer piso, la tarea de lavado lleva menos tiempo y es más cómodo para la abuela, que es quien suele encargarse de esta tarea.
De izquierda a derecha, en la foto: El Sr. Horii, su hija, y la abuela (madre de la Sra. Horii).
“Cuando le pedimos al Sr. Hashimoto que diseñara nuestro nuevo hogar, mi esposa y yo describimos minuciosamente nuestra vida cotidiana”, comenta Hirochika. “Luego, vino al apartamento para ver el estilo de vida que llevamos. Íbamos a pasar las próximas décadas viviendo en esta nueva casa: queríamos mantener intactas nuestras prioridades, necesidades y deseos”.
Hirochika está convencido de que el tiempo que uno pasa en el hogar ha de ser cómodo y agradable. “Por eso, nos tomamos nuestro tiempo para pensar cuidadosamente cada detalle, y para mostrar al diseñador y al arquitecto el estilo de vida que queríamos”, dice satisfecho.
¿Y TÚ?
¿Qué te ha parecido esta casa japonesa? ¿Prefieres los espacios abiertos o la intimidad de un hogar compartimentado? Cuéntanos en los comentarios
“Cuando le pedimos al Sr. Hashimoto que diseñara nuestro nuevo hogar, mi esposa y yo describimos minuciosamente nuestra vida cotidiana”, comenta Hirochika. “Luego, vino al apartamento para ver el estilo de vida que llevamos. Íbamos a pasar las próximas décadas viviendo en esta nueva casa: queríamos mantener intactas nuestras prioridades, necesidades y deseos”.
Hirochika está convencido de que el tiempo que uno pasa en el hogar ha de ser cómodo y agradable. “Por eso, nos tomamos nuestro tiempo para pensar cuidadosamente cada detalle, y para mostrar al diseñador y al arquitecto el estilo de vida que queríamos”, dice satisfecho.
¿Y TÚ?
¿Qué te ha parecido esta casa japonesa? ¿Prefieres los espacios abiertos o la intimidad de un hogar compartimentado? Cuéntanos en los comentarios
Quién vive aquí: Una pareja casada, con su niño y la abuela (madre de ella).
Situación: Toyonaka, Osaka
Superficie: 260 m² (terreno); 180 m² (edificio)
Proyecto: Hashimoto Kenji Architecture & Design
La pareja explica que se sienten seguros y cómodos en un espacio abierto donde están todos juntos en vez de estar “encerrados en habitaciones separadas”. De hecho, cuando trabajan en casa, todos los hacen en el gran espacio abierto que integra cocina y salón-comedor. Hasta la pequeña hace los deberes con ellos.
Arquitectura japonesa actual: La vivienda como laboratorio