Vacaciones en familia en un piso de estilo mediterráneo
Con una estética mediterránea, y en solo 6 semanas, se ha renovado este piso para disfrutar en familia.
En solo seis semanas, los jóvenes propietarios de esta vivienda, y sus dos hijos, ya estaban disfrutando de su casa. Y no solamente ellos, sino también sus amigos y familiares porque hay sitio para hasta cuatro personas más. “Fue una locura porque durante la pandemia tuvimos problemas de suministros y, la verdad, nos tocó sufrir un poco. La clave para lograr acabar fue una buena coordinación de todos los industriales”, comparte Anna Feced, responsable de la reforma. Para Feced, el mayor reto consistió en que no podía haber diferentes profesionales trabajando al mismo tiempo porque se molestaban. “Organizar bien los tiempos de cada uno permitió cumplir plazos”, dice.
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Tras la reforma, la zona de día se ha transformado en un gran espacio abierto. El antiguo pasillo ya no está y se ha colocado una gran mesa de madera maciza para comer todos juntos.
Antes y durante la reforma, cliente y profesional utilizaron las herramientas de Houzz Pro. “Sí, uso la herramienta de videollamadas habitualmente con mis clientes –apunta Feced. En general, Houzz Pro me parece útil de cara al cliente. Por ejemplo, en 2022 estoy usando la herramienta de presupuestos y, la verdad, me parece muy intuitivo crear uno. Además, es sencillo compartirlo después con los clientes a través de la plataforma”, continúa.
Antes y durante la reforma, cliente y profesional utilizaron las herramientas de Houzz Pro. “Sí, uso la herramienta de videollamadas habitualmente con mis clientes –apunta Feced. En general, Houzz Pro me parece útil de cara al cliente. Por ejemplo, en 2022 estoy usando la herramienta de presupuestos y, la verdad, me parece muy intuitivo crear uno. Además, es sencillo compartirlo después con los clientes a través de la plataforma”, continúa.
ANTES: el piso es de los años 70 y, aunque cuidado, estaba pintado con colores estridentes y el suelo de baldosa brillante resultaba algo frío a la vista.
“El encargo que le planteamos a Anna fue convertir un apartamento de estética ochentera, que tenía cocina y comedor separados, en un apartamento abierto, moderno y cálido. Lo principal del proyecto fue unir la cocina con el salón-comedor y crear un espacio único. Además, todo tenía que realizarse en poco más de un mes”, cuenta Vanesa Molina, la propietaria.
“El encargo que le planteamos a Anna fue convertir un apartamento de estética ochentera, que tenía cocina y comedor separados, en un apartamento abierto, moderno y cálido. Lo principal del proyecto fue unir la cocina con el salón-comedor y crear un espacio único. Además, todo tenía que realizarse en poco más de un mes”, cuenta Vanesa Molina, la propietaria.
El suelo es parqué vinílico, “resistente y perfecto para no tener que sufrir por los pies mojados de la playa o si los niños arrastran juguetes por el suelo”, dice la profesional.
En general, la casa responde a un estilo mediterráneo, con la madera y los tonos claros como protagonistas. “Al poner un color muy suave en la cocina (en la imagen) conseguimos darle un toque de rock & roll y transformarla en un espacio divertido”.
En general, la casa responde a un estilo mediterráneo, con la madera y los tonos claros como protagonistas. “Al poner un color muy suave en la cocina (en la imagen) conseguimos darle un toque de rock & roll y transformarla en un espacio divertido”.
Los armarios panelados en la cocina lo esconden todo: lavavajillas, lavaderos, nevera. En la imagen se aprecia cómo el lavadero queda escondido. “Los espacios están bien dimensionados e integrados. Además, tenemos un lavadero con puerta integrada en el mobiliario de la cocina que queda genial”, dice la dueña.
“Las cocinas integradas no siempre funcionan. En este caso, queda bien porque es una residencia vacacional, pero en una residencia habitual no lo vería. Seguramente, se hubiera diseñado parcialmente cerrada”, dice Feced.
“Las cocinas integradas no siempre funcionan. En este caso, queda bien porque es una residencia vacacional, pero en una residencia habitual no lo vería. Seguramente, se hubiera diseñado parcialmente cerrada”, dice Feced.
A la izquierda, el plano de la vivienda antes de la reforma, con cocina y salón-comedor separados. A la derecha, tras la reforma, la zona de día es ya un único espacio.
En la imagen una de los tres dormitorios, con una estética natural, papel pintado y atmósfera relajante para poder descansar. “La elección del mobiliario fue un trabajo conjunto con los clientes”, cuenta la profesional.
En la imagen, el recibidor, sencillo y elegante. “A quien quiera una reforma en poco tiempo, pero bien hecha, le recomiendo confiar en los profesionales elegidos porque hay que tomar muchas decisiones”, dice Feced.
Los clientes aprecian siempre que el profesional les sepa escuchar. “Destacaría de Anna la capacidad para adaptarse y aceptar las sugerencias. Sin conocer a las personas, no es fácil acertar a la primera. Anna atendió a nuestras ideas y buscó todas las opciones posibles para cumplirlas”, comparte la propietaria.
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¿Qué es lo que te gusta de este piso de vacaciones? Esperamos tus comentarios
Los clientes aprecian siempre que el profesional les sepa escuchar. “Destacaría de Anna la capacidad para adaptarse y aceptar las sugerencias. Sin conocer a las personas, no es fácil acertar a la primera. Anna atendió a nuestras ideas y buscó todas las opciones posibles para cumplirlas”, comparte la propietaria.
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Quién vive aquí: Vanesa Molina, su marido y sus dos hijos
Situación: Calafell
Superficie: 80 metros cuadrados y 100 de terraza exterior
Presupuesto: 45.000 €, más IVA
Proyecto: Anna Feced Interiorismo
Año del proyecto: 2021
Cuando están de vacaciones, los dueños de este piso cocinan mucho. Precisamente por eso, pidieron una cocina cómoda y abierta: querían pasar mucho tiempo juntos.
En la imagen, se ve cómo el mueble de la cocina se expande dando forma a una vitrina en el comedor, conectando así ambos espacios. “También pidieron que la estética de la casa fuera completamente distinta a la su residencia habitual. Ellos utilizan esta casa durante todo el año y, aunque esté justo frente al mar, no querían el típico piso de playa”, desvela la profesional.
Feced afirma que la isla de la cocina es la zona que más le gusta de la casa. “Cuando he visitado a los clientes después de la reforma, siempre nos quedamos en la isla. Al tener los taburetes, te invita a sentarte o a estar de pie, dejar cosas encima… Es un espacio polivalente”.