Iluminación
Tom Dixon: ¡Hágase la luz!
Fiel al metal como su material de cabecera, sus luminarias, entre la tradición y la modernidad, le han dado proyección internacional.
Nació en 1959 en Sfax, Túnez, pero Londres es su ciudad y donde ha desarrollado su exitosa carrera. De formación autodidacta, pronto empezó a trabajar por su cuenta en la soldadura tras un breve paso por la Chelsea School of Art. A finales de los años 80 comenzó a dedicarse plenamente a la fabricación de muebles de metal, después de un accidente de moto que le impidió continuar con su otra profesión, la de bajista. Enseguida destacó por el estilo personal y post-punk que expresaba mediante el trabajo del hierro, el acero, el latón o el cobre. A principios de los 90 fue tocado por la varita mágica de Giulio Cappellini, quien incluyó en la colección de la famosa firma italiana que lleva su apellido la S-Chair, lo que le introdujo inmediatamente en la escena internacional del diseño.
Desde entonces, no sólo ha posicionado su propia marca como una de las más importantes en el ámbito del diseño contemporáneo sino que también ha trabajado como director artístico para otras de la talla de Habitat y Artek. Algunas de sus piezas más conocidas, las lámparas Mirror Ball, Copper Shade o la serie Beat, se caracterizan por un estilo que oscila entre la tradición y la modernidad de una forma maestra, con una estética contundente pero a la vez elegante y, por encima de todo, fácil de combinar en ambientes de géneros muy dispares. Además, muchos de ellos ya son parte de algunas de las más prestigiosas colecciones del mundo en museos como el V&A de Londres, los MoMA de Nueva York y Tokyo o el Centre Pompidou de París.
Desde entonces, no sólo ha posicionado su propia marca como una de las más importantes en el ámbito del diseño contemporáneo sino que también ha trabajado como director artístico para otras de la talla de Habitat y Artek. Algunas de sus piezas más conocidas, las lámparas Mirror Ball, Copper Shade o la serie Beat, se caracterizan por un estilo que oscila entre la tradición y la modernidad de una forma maestra, con una estética contundente pero a la vez elegante y, por encima de todo, fácil de combinar en ambientes de géneros muy dispares. Además, muchos de ellos ya son parte de algunas de las más prestigiosas colecciones del mundo en museos como el V&A de Londres, los MoMA de Nueva York y Tokyo o el Centre Pompidou de París.
Beat Light (2006)
Son de las lámparas más populares del diseño contemporáneo. Esta serie de latón es una de las piezas de Dixon que mejor fusionan tradición y vanguardia. Inspiradas en la forma y sencillez de las ollas de cobre antiguas, se fabrican en distintos tamaños y acabados. Aunque las Beat Lights más habituales son las del interior de latón con la parte exterior lacada en negro, la colección incluye también una versión en blanco.
Son de las lámparas más populares del diseño contemporáneo. Esta serie de latón es una de las piezas de Dixon que mejor fusionan tradición y vanguardia. Inspiradas en la forma y sencillez de las ollas de cobre antiguas, se fabrican en distintos tamaños y acabados. Aunque las Beat Lights más habituales son las del interior de latón con la parte exterior lacada en negro, la colección incluye también una versión en blanco.
Pipe Light (2007)
El diseño de estas lámparas tubulares de aluminio con un exterior en negro mate resulta sumamente atractivo. A pesar de su marcado estilo industrial, encajan bien tanto con una decoración clásica como contemporánea. Debido a su longitud, se recomiendan especialmente para estancias con una altura de techo generosa.
Luz del Norte: 8 lámparas de diseño escandinavo
El diseño de estas lámparas tubulares de aluminio con un exterior en negro mate resulta sumamente atractivo. A pesar de su marcado estilo industrial, encajan bien tanto con una decoración clásica como contemporánea. Debido a su longitud, se recomiendan especialmente para estancias con una altura de techo generosa.
Luz del Norte: 8 lámparas de diseño escandinavo
Bash Vessel (2012)
Estos dos centros de mesa esculturales en latón dorado, potencian de una manera extraordinaria la presencia de la mesa que adornan. Además pueden usarse también como jarrones o cestas de fruta. Su tono dorado funciona como eco perfecto del interior de las lámparas de techo de la serie Beat.
Estos dos centros de mesa esculturales en latón dorado, potencian de una manera extraordinaria la presencia de la mesa que adornan. Además pueden usarse también como jarrones o cestas de fruta. Su tono dorado funciona como eco perfecto del interior de las lámparas de techo de la serie Beat.
Void (2010)
Para crear esta lámpara de latón macizo, que se encuentra disponible en acabado cobre, oro y plata, Tom Dixon utilizó la medalla olímpica como punto de partida. En espacios de decoración neutra, reunir las tres versiones en una sola composición genera un conjunto de excepcional presencia.
Para crear esta lámpara de latón macizo, que se encuentra disponible en acabado cobre, oro y plata, Tom Dixon utilizó la medalla olímpica como punto de partida. En espacios de decoración neutra, reunir las tres versiones en una sola composición genera un conjunto de excepcional presencia.
Copper Shade (2013)
Amante del cobre, Tom Dixon lo ha utilizado profusamente en muchas de sus obras. Destaca especialmente en este modelo, que es su bestseller. Esta imponente y brillante esfera es perfecta para realzar decoraciones muy limpias y contemporáneas, no sólo aquellas con sabor de los setenta.
Amante del cobre, Tom Dixon lo ha utilizado profusamente en muchas de sus obras. Destaca especialmente en este modelo, que es su bestseller. Esta imponente y brillante esfera es perfecta para realzar decoraciones muy limpias y contemporáneas, no sólo aquellas con sabor de los setenta.
En su versión suspendida el modelo se presta a la multiplicación. Una composición que funciona muy bien consiste en alinear varios modelos del mismo tamaño sobre una mesa de comedor ocupando toda su longitud.
También se pueden colocar varias Copper Shade a diferentes alturas para aumentar el efecto de la composición y resaltar un techo muy elevado. En un vestíbulo, un salón, una cocina o una mesa de comedor, preferiblemente redonda u ovalada, esta opción es todo un acierto.
Pero además, hemos querido rescatar dos de las sillas más conocidas de Dixon…
Pero además, hemos querido rescatar dos de las sillas más conocidas de Dixon…
Bird Chair (1991)
Ese mismo año y también para la firma Cappellini, Tom Dixon diseño la Bird Chair, cuya forma, como su nombre indica en inglés, evoca la silueta de un pájaro. Un modelo tapizado, macizo y aéreo al mismo tiempo, que es un cruce entre una silla, un diván y una mecedora.
Diseños para la sala de estar que nunca pasan de moda
Ese mismo año y también para la firma Cappellini, Tom Dixon diseño la Bird Chair, cuya forma, como su nombre indica en inglés, evoca la silueta de un pájaro. Un modelo tapizado, macizo y aéreo al mismo tiempo, que es un cruce entre una silla, un diván y una mecedora.
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S-Chair (1991)
Comercializada por la firma Cappellini, esta silla con estructura de metal y asiento de silueta sumamente femenina en cuerda o mimbre fue el punto de partida y el símbolo del éxito del diseñador. Se fabrica en distintos materiales y colores, incluso tapizada, lo que permite integrarla perfectamente tanto en un estilo rústico como en uno contemporáneo.
CUÉNTANOS…
¿Tienes algún diseño de Tom Dixon en casa? Quizá lo hayas descubierto leyendo este artículo. Sube una foto en la sección de comentarios para que podamos verlo.
Comercializada por la firma Cappellini, esta silla con estructura de metal y asiento de silueta sumamente femenina en cuerda o mimbre fue el punto de partida y el símbolo del éxito del diseñador. Se fabrica en distintos materiales y colores, incluso tapizada, lo que permite integrarla perfectamente tanto en un estilo rústico como en uno contemporáneo.
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Mirror Ball (2003)
La Mirror Ball es ya en un auténtico clásico del diseño en lo que llevamos de siglo XXI. Las lámparas Mirror Ball tienen una presencia muy vanguardista y al mismo tiempo un gusto muy pop. Su globo está hecho en policarbonato y va recubierto de una fina capa cromada que aporta el efecto espejo. Las lámparas Mirror Ball se fabrican en diferentes tamaños y son ideales para crear esculturales composiciones que realcen desde arriba una estancia espaciosa o un techo con mucha altura.