Jardín de la semana: Un paraíso de flores y plantas en Guatemala
Descubre un lugar de fantasía en pleno Caribe; con loros, pavos reales, flores y árboles exóticos y coloridos.
Mientras paseamos con Edgar por su jardín en Guatemala, en el corazón del Caribe, al sur de la península de Yucatán, cuenta que su jardín le encanta “porque en él he podido recrear ese pequeño paraíso que desde niño solía disfrutar en los clásicos de Walt Disney, donde todo es bello y las plantas y animales conviven en completa armonía. Me gustan en él los colores vivos e intensos y mis aves son como flores que deambulan a sus anchas, alegrándome y alegrando a mis amigos”. En el jardín de Edgar Rolando Rossal Chávez uno está constantemente frotándose los ojos; incrédulo sobre si el pavo real blanco que está viendo es real o no. Árboles de fuego (Delonix regia), de jade (Strongylodon macrobotrys), ipé rosa (Tabebuia chrysantha) y la colección más increíble de Bromeliáceas completan la escena.
“Vivo este jardín desde niño. Mi familia compró esta casa cuando yo tenía 7 años. Durante un tiempo mis padres la rentaron. Nosotros vivíamos en otra con un jardín mas extenso. Pero tuve suerte y decidieron retornar. Desde ese momento, lo empecé a cultivar en serio. Siempre, desde muy temprana edad, fui un fanático de la jardinería. Ahora, siento no conservar fotos de mis otras viviendas, pues fue siempre algo a lo que dediqué todo mi entusiasmo”, confiesa Edgar.
Edgar tiene un sentido del humor contagioso. Para cuidar y mantener esta maravilla, le dedica un poco de su tiempo cada día; incluidos los fines de semana.
Realmente es una labor cotidiana y constante. A diferencia de los jardines estacionales, como los de España, que se aletargan en invierno, este paraíso tropical siempre se encuentra en actividad y necesita ser regado, podado, limpiado de hojas y flores secas…
El tapiz verde de la pradera, perfectamente dibujada y cortada, es la durísima grama de las Bermudas (Cynodon dactylon). En España se seca y desaparece durante el invierno, ya que se trata de una herbácea muy friolera; pero aquí, en estas doradas tierras, permanece siempre con ese verde azulado.
Varios islotes-macizo de las más variadas plantas exóticas, que aquí solo vemos en la floristería, rompen la continuidad del césped.
Varios islotes-macizo de las más variadas plantas exóticas, que aquí solo vemos en la floristería, rompen la continuidad del césped.
Las flores son unas de las grandes protagonistas. Esta es una de las especies de flor dominantes en el jardín: Brunfelsia pauciflora. Cada corola es una verdadera exquisitez que ofrece jaspeados verdaderamente atractivos. Edgar ha conformado con esta Solanácea un verdadero seto a prueba de pavos reales.
Borduras: Ideas para definir y resaltar tus flores y plantas
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Un pavo real de la India y uno de pecho azul son la gran atracción del jardín. “Duermen en los arboles. Fueron siempre mis aves preferidas –confiesa Edgar.
Tuve mi primer pavo real con 15 años y desde entonces he vivido con ellos”.
Tuve mi primer pavo real con 15 años y desde entonces he vivido con ellos”.
Los pavos reales pasan la noche en las ramas de los árboles. Edgar solo les alimenta con concentrado alto en proteína para aves, proporcionándoles electrolitos y antibióticos solubles en agua de vez en cuando. En la imagen, un pavo real albino, una rara-avis del mundo avícola y uno de los favoritos del propietario.
La cola de un pavo real cuenta con 275 plumas y cada una presenta unos ocelos (manchas en forma de ojo). De hecho, cuenta Edgar, cuantos más ocelos tiene un pavo real en las plumas de su cola, mayor jerarquía ostenta en el grupo.
En la imagen: un pavo real albino (Pavo cristatus) camina sobre unos nazarenos azules (Muscari armeniacum).
Guacamayos, cotorras y cacatúas deambulan por el jardín a sus anchas. Esta de la imagen es una preciosa amazona que posaba sobre la espectacular flor de la Heliconia rostrata (pico de tucán o platanillo).
Una vivienda de inspiración guatemalteca en Palm Springs
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El ara o guacamayo macao (Ara macao) presenta un poderoso pico y cola muy larga.
En la foto, los guacamayos ara (Ara macao).
Con su pico de un palmo de largo y colores vivos, y con un carácter dócil y amable, el tucán (Ramphastos toco) es un atractivo más del jardín. Sus brillantes tonalidades combinan a la perfección con el resto del entorno.
Aunque Edgar tiene varias plantas preferidas, se queda con el Strongylodon macrobotrys, comúnmente llamada Liana de Jade. “Me gusta por su color verde turquesa y sus inflorescencias que llegan a medir mas de un metro de longitud. Su origen es una isla de Filipinas y figura estar entre una de las lianas tropicales mas exóticas del mundo. Tengo varios árboles más que me gustan y todos han sido seleccionados por sus espectaculares inflorescencias, como el flamboyan (Delonix Regia), la tabebuia (Tabebuia chrysantha), el árbol de Júpiter (Lagerstroemia Indica)…”
En la foto, en primer plano, la maravillosa flor de Heliconia subulata.
En la foto, en primer plano, la maravillosa flor de Heliconia subulata.
Palmera botella o mascarena (Hyophorbe lagenicaulis)
Bromelia nidularium verde (Neoregelia carolinae)
Agapanto o flor del amor o lirio africano (Agapanthus africanus)
“Me gustan los colores vivos e intensos de mi jardín y mis aves son como flores que deambulan por él”. A Edgar le encantan las formas y el cromatismo tropical y la manera en que ha podido fusionar vida animal y vegetal. Confiesa que solo recurre a pesticidas en casos extremos. Regularmente, el jardín no requiere insecticidas.
En el macizo en primer plano, helechos nido de ave (Asplenium nidus-avis), bromelias plumas de indio (Vriesia splendens) y Nidularium tricolor.
Pavo real azul turquesa (Pavo cristatus), sobre fondo de margaritón gigante (Leucanthemum maximum)
La familia de las Bromeliáceas es una de las más importantes del mundo entre las plantas epífitas (especies que fijan sus raíces en madera e incluso en piedra, pero no en tierra). Son habitantes de las selvas húmedas, profundas y oscuras de América central y del sur.
Estas plantas toman los nutrientes que necesitan de unos embalses de agua que se forman en sus cogollos, que suelen ser de vivos colores para atraer a animales. Edgar tiene su jardín lleno de estas especies que en España solo pueden ser cultivadas como plantas de interior. Él crea unos deliciosos árboles de Bromelias o Bromeliáceas, fijando las plantas a los troncos secos con alambre delgado y sus raíces cubiertas con fibra de coco para procurar la humedad.
Flash tendencias: Papeles pintados que recrean un paraíso tropical
Estas plantas toman los nutrientes que necesitan de unos embalses de agua que se forman en sus cogollos, que suelen ser de vivos colores para atraer a animales. Edgar tiene su jardín lleno de estas especies que en España solo pueden ser cultivadas como plantas de interior. Él crea unos deliciosos árboles de Bromelias o Bromeliáceas, fijando las plantas a los troncos secos con alambre delgado y sus raíces cubiertas con fibra de coco para procurar la humedad.
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Bromelia guzmania (Guzmannia lingulata)
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¿Qué te parece el jardín de Edgar? Comparte tus opiniones en la sección de comentarios.
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Quién vive aquí: Edgar Rolando Rossal Chávez, arquitecto paisajista e interiorista, con su madre. En el jardín viven también sus pavos reales y loros
Situación: Guatemala
Superficie del jardín: Alrededor de 1.000 metros cuadrados
Dato curioso: Sus pavos reales viven en plena naturaleza y duermen en los árboles. Precisamente un árbol, el flamboyant (Delonix regia), fue plantado por su padre, su hijo y él mismo al volver de un viaje tropical por la costa de Guatemala. Tres generaciones unidas en su plantación.