Dormitorio: 13 ideas para convertirlo en tu lugar preferido
Un dormitorio con la decoración adecuada consigue, entre otras cosas, que nos sintamos mejor y descansemos bien.
Se trata de un espacio en el que pasamos muchas horas, pero los adultos –al contrario que los niños, que hacen mucha más vida en él– lo usamos sobre todo para dormir y con frecuencia no le prestamos suficiente atención. En general, las zonas comunes se llevan el trozo más grande del pastel en lo que a decoración se refiere. Échale un vistazo a estas ideas prácticas y económicas con las que darle un nuevo aire este espacio de la casa y convertirlo en tu lugar preferido. Basta con un poco de imaginación, buen gusto y las soluciones adecuadas. Aquí te damos algunas sugerencias.
En primer lugar, dispón los muebles de tal manera que consigas una circulación directa y que facilite el paso. Piensa cuáles son los 'destinos' principales dentro del dormitorio: la cama, el armario, el rincón de trabajo, la puerta de entrada o la del baño. Lógicamente, todo depende mucho de la planta de la habitación y de sus dimensiones. Pero merece la pena pararse a pensar un poco (o pedir consejo a un profesional) sobre cuál es la mejor distribución para nuestro caso.
Otorga todo el protagonismo al elemento principal: la cama. Hay muchas maneras de hacerlo. Una de ellas, como en esta imagen, es colgar encima un cuadro que te guste y que vaya con el estilo de la habitación. Elígelo bien: debe atraer la mirada y aportar alguna emoción agradable al entrar en la habitación. Es un recurso que dará un valor positivo a nuestro dormitorio y que, por tanto, hará que nos sintamos mejor cuando estemos en él.
Además, también es importante elegir una ropa de cama atractiva. Probablemente sea la mejor manera de conseguir que el dormitorio tenga personalidad. Colchas, edredones, mantas o cojines…, las combinaciones son infinitas, según nuestros gustos o dependiendo de la época del año. En verano, por ejemplo, podemos usar tejidos ligeros y de colores más frescos. En invierno, en cambio, será más apropiado utilizar alguna manta de lana o con una textura que aporte calidez.
Coloca un cabecero bonito y original. Es otra forma de dar preponderancia al elemento principal del dormitorio. Si el cabecero es grande, como el de esta imagen, hará las veces de elemento decorativo, sustituyendo el cuadro del que hablábamos anteriormente. No es necesario complicarse mucho. Actualmente existen numerosas opciones originales, económicas y muy artísticas.
11 cabeceros sorprendentes hechos con objetos reciclados
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Procura que la iluminación sea adecuada. Como en cualquier habitación, la luz es un elemento importante a tener en cuenta, ya se trate de luz natural o artificial. Aprovecha la ventana para aportar luz natural sobre la mesa de estudio o de trabajo, si la tienes. La luz principal de la habitación, que generalmente proviene del techo, debe tener la potencia necesaria para poder ver con claridad cuando lo necesitemos. Además, es importante colocar otros focos de luz para tareas puntuales: junto a la cama, en la mesa de estudio o encima del armario de la ropa, por ejemplo. De esta manera resolvemos una cuestión práctica y otra estética, ya que estas luces secundarias hacen más acogedora la estancia.
Elige bien la mesilla de noche porque aunque es un mueble relativamente pequeño no deja de ser importante. Una mesilla de noche bien elegida consigue un efecto estético espectacular y, evidentemente, cumple además con una función práctica: te servirá para dejar un libro, el móvil o el despertador. Procura que tenga espacio suficiente para almacenar algunas cosas y, sobre todo, que sea muy bonita. Normalmente –como ocurre con la mesilla de noche– las pequeñas piezas que decoran un hogar hacen destacar el buen gusto de todo el conjunto.
Cómo dar con la mesilla de noche perfecta
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La mesa de estudio o de trabajo y la silla. Al pensar la distribución del dormitorio, debemos buscar un espacio para colocar un rincón de estudio o trabajo. Esto facilita enormemente poder dedicar el tiempo necesario a estas tareas. Si es posible, lo situaremos junto a la ventana, para aprovechar las horas de luz natural. En cualquier caso, ten en cuenta que la mesa debe tener las medidas adecuadas para apoyarnos y trabajar con comodidad. La silla también es importante: además de ser bonita debe ser cómoda, lo suficiente para poder pasar unas horas en ella sin que sufra nuestra espalda. Teniendo esto en cuenta, el elenco de posibilidades y de estilos es enorme.
Coloca un armario adaptado a tus necesidades y a tu espacio. Tener el mejor armario posible nos evitará desorden y confusión en el dormitorio. No es necesario gastar mucho dinero para conseguir un lugar apropiado para nuestra ropa. Actualmente hay soluciones a muy buen precio. Modelos abiertos o cerrados, con estructura de madera o metálica, con distribución básica o algo más elaborada… Pero no te olvides de que lo importante es que tu dormitorio esté bien organizado y transmitir esa sensación de orden a nosotros mismos y a quien entra en él.
¿Un dormitorio patas arriba? Déjalo impecable sin esfuerzo en siete días
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Coloca un espejo en el dormitorio. Es una pieza que además de tener una finalidad práctica aportará amplitud al espacio. Puedes colgarlo en la pared o, si lo prefieres, como en la imagen, puedes dejarlo apoyado sobre el suelo. Si el espacio es muy reducido, podrías incluso situarlo en la puerta del armario. Se trata de un recurso sencillo con el que también darás una apariencia más actual a la habitación.
Pinta todas o alguna de las paredes. Así aportamos personalidad y mayor atractivo. Elige los colores y los motivos dependiendo de quién dormirá en ella. Si es para gente joven, los diseños más vistosos son muy adecuados. En general, es preferible usar este recurso con precaución y consultar a un experto o decorador. Así evitaremos hacer una mala elección que, con el tiempo, nos podría llegar a cansar. El dormitorio de la fotografía es un ejemplo de que existen soluciones modernas y originales.
Color en el dormitorio: Atrévete con textiles muy distintos
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Una estantería para ‘nuestras cosas’. Puede ser también una manera de decorar nuestro dormitorio. Necesitamos espacios para colocar nuestro libros, objetos o lo que queramos tener a mano. Elige una del tamaño adecuado y del estilo que prefieras. A veces las soluciones más sencillas, como la estantería de la foto, son también las más efectivas. Incluso podríamos usar unos estantes si no disponemos de mucho espacio. Lo importante es que procures tener las cosas con cierto orden y con algún detalle decorativo bonito que dé un punto de color.
Coloca una alfombra pequeña (o grande) y verás como el dormitorio se transforma completamente. Para elegir una tendremos que tener en cuenta el estilo y el material de que está hecha, dependiendo de la época del año en que la usaremos. Y, por supuesto, debe estar en sintonía con el resto de la decoración del espacio. Una alfombra bien elegida aporta comodidad, calidez y puede cambia completamente el aspecto general de la habitación.
Entrevistas Houzz: 10 minutos con Nani Marquina
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Crea tu rincón de lectura. Un sillón, una butaca o una chaise longue es una de las mejores opciones para convertir el dormitorio en el lugar perfecto para pasar un buen rato con nuestro libro preferido. A veces necesitamos retirarnos un rato del ajetreo diario y tener un lugar para hacerlo nos puede cambiar (y mejorar) nuestra calidad de vida. Dependerá, por supuesto, de la dimensión de la habitación. Pero generalmente no hace falta mucho espacio para colocar una butaca confortable y cómoda donde poder sentarnos un rato.
¿Y TÚ?
¿Cómo has decorado tu dormitorio? ¿Con qué idea de todas estas te quedarías?
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