Arquitectura
5 casas que reinterpretan con mimo la tradición
Descubre una selección de cuidadas reformas que, respetando las características originales, añaden elementos nuevos.
Un importante volumen de los proyectos que firman los arquitectos no parten de un solar vacío, sino que son rehabilitaciones de casas y edificios con una historia detrás. Una buena rehabilitación no es un mero lavado de cara, sino que busca hacer convivir el pasado y el presente reinterpretando elementos históricos. Además, rehabilitar usando materiales y técnicas autóctonas es apostar por la sostenibilidad. En este artículo hemos seleccionado algunos proyectos interesantes en los que se ha reinventado la tradición arquitectónica dando lugar a espacios contemporáneos.
El edificio, que ha sido objeto de transformaciones a lo largo del tiempo, ha revelado en su proceso de restauración diferentes elementos representativos de la arquitectura tradicional catalana: arcos góticos, fragmentos de frescos en las paredes, suelo de baldosas cerámicas, viguetas de madera, revoltón cerámico y mortero de cal.
El resultado final, con la superposición de vestigios históricos y elementos actuales –como estos tabiques de policarbonato–, da lugar a un espacio ecléctico que, como si de un organismo vivo se tratara, deja ver las huellas del paso del tiempo en la construcción.
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El resultado final, con la superposición de vestigios históricos y elementos actuales –como estos tabiques de policarbonato–, da lugar a un espacio ecléctico que, como si de un organismo vivo se tratara, deja ver las huellas del paso del tiempo en la construcción.
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El trabajo de rehabilitación consistió en un meticuloso proceso de acercamiento, descubrimiento y limpieza unido a una labor de redistribución que consiguiese adaptar las viviendas al modo de vida actual.
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2. La elegante reinterpretación de una casa pirenaica
El equipo de DOM Arquitectura recibió el encargo de convertir un grupo de construcciones tradicionales de un pequeño pueblo de la Cerdanya, en los Pirineos, en una vivienda con pabellones para invitados.
El equipo de DOM Arquitectura recibió el encargo de convertir un grupo de construcciones tradicionales de un pequeño pueblo de la Cerdanya, en los Pirineos, en una vivienda con pabellones para invitados.
Los arquitectos decidieron abordar el proyecto manteniendo los volúmenes existentes –un pajar, una cuadra, un almacén, una pequeña vivienda y un badiu–, rehabilitando las fachadas y cubiertas y redistribuyendo el interior de los espacios. El badiu es un tipo de porche característico de las viviendas pirenaicas. Se erige como espacio protagonista y resulta perfecto para vivir y disfrutar del exterior.
En los pavimentos, la madera y las baldosas hidráulicas son los protagonistas. En algunas paredes se ha conservado la piedra al descubierto, mientras que otras se han pintado en blanco y en algunos casos se han revestido de madera. El acero se ha utilizado como material representativo de los elementos arquitectónicos nuevos, como la escalera. En todo el espacio, el respeto por la tradición en la construcción, con algunos toques contemporáneos, es la máxima.
En cuanto a la decoración, el mobiliario contemporáneo coexiste con otros materiales tradicionales. Las lámparas de mimbre aportan calidez y personalidad al interior.
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3. La rehabilitación minimalista de una edificación medieval
En esta casa del siglo XVI en el barrio medieval de Girona, la arquitecta Anna Noguera decidió liberar el edificio de los añadidos y elementos superficiales que a lo largo de los siglos se habían ido agregando a la construcción, restándole valor histórico. Como resultado de este proceso, los forjados han quedado expuestos y los muros al desnudo, deshaciéndose de revestimientos pasados.
En esta casa del siglo XVI en el barrio medieval de Girona, la arquitecta Anna Noguera decidió liberar el edificio de los añadidos y elementos superficiales que a lo largo de los siglos se habían ido agregando a la construcción, restándole valor histórico. Como resultado de este proceso, los forjados han quedado expuestos y los muros al desnudo, deshaciéndose de revestimientos pasados.
La intervención ha sido minimalista y respetuosa con el lugar. En la elección de materiales ha primado la austeridad. Acero, hormigón y madera se funden con los elementos más naturales del entorno, como son el espacio, la luz, la sombra, el fuego y la piedra.
Los muros de piedra han quedado a la vista tanto en el interior como en el exterior. Durante el proceso de rehabilitación se prestó atención al aspecto final de su textura, color y juntas. Los suelos de hormigón pulido crean un plano horizontal continuo y neutro que convive con el resto de materiales. Asimismo, los forjados vistos de vigas y entrevigado de madera dan calidez al espacio, mientras que el acero crea contraste aporta una nota contemporánea.
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4. Un viejo patio barcelonés resucitado
Esta vivienda se ubica en el barrio de Sarrià, en el que son habituales las construcciones tradicionales con un cierto aspecto rural, agrupadas en hileras y con acceso a patios interiores, en muchos casos en desuso.
La interiorista Isabel López Vilalta decidió recuperar ese espacio, darle valor y convertirlo en el centro de este proyecto. El patio amplía el espacio interior, gracias a la continuidad visual que ha generado la diseñadora. Para protegerse del sol y las miradas indiscretas, López Vilalta ha diseñado un sistema de toldos creados a partir de las tradicionales persianas enrollables de madera. Gracias a un sistema domótico, este elemento tradicional se ha convertido en una moderna cubierta retráctil.
Esta vivienda se ubica en el barrio de Sarrià, en el que son habituales las construcciones tradicionales con un cierto aspecto rural, agrupadas en hileras y con acceso a patios interiores, en muchos casos en desuso.
La interiorista Isabel López Vilalta decidió recuperar ese espacio, darle valor y convertirlo en el centro de este proyecto. El patio amplía el espacio interior, gracias a la continuidad visual que ha generado la diseñadora. Para protegerse del sol y las miradas indiscretas, López Vilalta ha diseñado un sistema de toldos creados a partir de las tradicionales persianas enrollables de madera. Gracias a un sistema domótico, este elemento tradicional se ha convertido en una moderna cubierta retráctil.
En el interior se han reutilizado elementos de la construcción original. Así, unas puertas de madera recuperadas y restauradas actúan ahora como mamparas, conformando el cerramiento del nuevo espacio para el dormitorio.
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5. Un tejido cerámico para una casa del siglo XVI
El estudio BLUR Arquitectura recibió el encargo de crear una casa rural en un edificio del siglo XVI en San Vicente de la Sonsierra (La Rioja). El presupuesto era reducido y solo se conservaba en buen estado la fachada principal y un calado de mampostería. El criterio de actuación fue utilizar el menor número de materiales para así hacer destacar la piedra existente como material noble.
El estudio BLUR Arquitectura recibió el encargo de crear una casa rural en un edificio del siglo XVI en San Vicente de la Sonsierra (La Rioja). El presupuesto era reducido y solo se conservaba en buen estado la fachada principal y un calado de mampostería. El criterio de actuación fue utilizar el menor número de materiales para así hacer destacar la piedra existente como material noble.
De este modo, una nueva escalera se erige como elemento protagonista del espacio. Gracias a unos tubos metálicos circulares de sección mínima, consigue parecer como flotante y exenta dentro de este interior. El pavimento de hormigón pulido por su parte unifica las estancias. Adicionalmente, se ha utilizado madera de roble en los elementos que no pertenecen a la construcción original, como los escalones y el mobiliario.
En la parte posterior de la edificación se ha creado una nueva fachada de aspecto totalmente contemporáneo a partir de un material tan tradicional como es el cerámico. Esta celosía de ladrillo sirve tanto para tamizar la luz como para proporcionar privacidad a las habitaciones.
El nuevo elemento reinventa el uso tradicional del ladrillo convirtiéndolo en un material ligero, con carácter casi textil, que deja pasar la luz. Se denomina Flexbrick y es un sistema industrializado basado en un trenzado de alambres de acero y una retícula de piezas cerámicas que mezcla este material tan presente en nuestras construcciones con la tecnología textil aplicada a la construcción.
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¿Y TÚ?
¿Has rehabilitado alguna casa tradicional para darle un look más contemporáneo? Sube fotos en los comentarios para que podamos ver cómo te ha quedado.
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El estudio de arquitectura Miralles-Tagliabue EMBT transformó este edificio de viviendas en el barrio gótico de Barcelona centrándose en la investigación y el descubrimiento de sus elementos originales.