¡Abajo el estrés! Practica el bricolaje en casa como ocio terapéutico
Tanto el bricolaje como la jardinería mejoran el estado de ánimo y la destreza manual o mental. Una psicóloga nos detalla sus beneficios.
El bricolaje y la jardinería son consideradas actividades de ocio terapéutico, una tendencia en alza como respuesta al estrés de la sociedad actual, además de una buena forma de compartir aficiones con la pareja y los hijos. Conoce los beneficios físicos y mentales que los psicólogos atribuyen a estas aficiones relacionadas con el hogar. Y si quieres convertirte ya mismo en un manitas, aquí te damos algunas pistas para iniciarte.
Al volver del trabajo todos buscamos distintas formas de relajarnos y desconectar. En ocasiones, lo hacemos a través de una afición que nos mantenga las manos ocupadas y la mente en reposo, sin tener que pensar en los problemas del día a día. Algunos salen a correr, otros cosen a máquina, hacen pasteles, crochet o pintan. Y muchos encuentran su vía de escape en el bricolaje y la jardinería.
Se conoce como ocio terapéutico a aquellas actividades que se disfrutan en el tiempo libre y que nos producen placer y relajación, requiriendo el uso de nuestras manos. Según la psicóloga Elisabeth Rusiñol, del Centro de Psicología Interpersonal, “realizar una acción que nos gusta no solo nos relaja, sino que también nos permite disfrutar de un tiempo en el que permanecemos atentos a algo que nosotros mismos hemos escogido”. Y es precisamente esa elección personal lo que hace que nos sintamos satisfechos.
En el caso del bricolaje, “al tener que emplear todos nuestros sentidos, nos sentimos más conectados con lo que estamos haciendo y nos llegamos a implicar emocional y personalmente con nuestros proyectos”.
¿No sabes dónde montar un taller en casa? Toma nota de estos consejos
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En lo que se refiere a la salud tanto física como mental, dado que requiere una concentración buscada, el bricolaje aporta una serie de beneficios que los psicólogos resumen en cuatro puntos:
- Reduce el estrés y la ansiedad
- Estimula la creatividad
- Potencia la capacidad de resolver problemas no convencionales
- Produce satisfacción por el ahorro económico que supone fabricar tus propios muebles
Asimismo, recientes estudios científicos, como el realizado por The Swedish School of Sport y publicado en el British Journal of Sports Medicine, afirman que el bricolaje y la jardinería pueden reducir el riesgo cardíaco y de derrame cerebral. Además, desde el punto de vista de la prevención, proporcionan una buena salud ocular.
Pero, ¿no son aficiones más para jubilados? Aunque conviene especialmente a personas jubiladas, por la satisfacción que les produce hacer algo por sí mismos o para los demás, la psicóloga Elisabeth Rusiñol explica que el bricolaje y la jardinería también están indicados para personas con un sobreesfuerzo intelectual, provocado por ejemplo por permanecer muchas horas delante de un ordenador.
También es adecuado para aquellos con un trabajo rutinario o poco creativo, ya que “ambas actividades ofrecen la posibilidad de hacer volar nuestra creatividad e imaginación, así como de estimular sentidos poco utilizados como el tacto en el caso del bricolaje y el olfato en el caso de la jardinería”.
Por todo ello, bricolaje y jardinería no entienden de edad. Son dos actividades que nos hacen sentir realizados, funcionales y creativos en cualquier momento de nuestra vida, al tiempo que mejoramos nuestro entorno estéticamente.
Convierte un palé en una otomana con tus propias manos
También es adecuado para aquellos con un trabajo rutinario o poco creativo, ya que “ambas actividades ofrecen la posibilidad de hacer volar nuestra creatividad e imaginación, así como de estimular sentidos poco utilizados como el tacto en el caso del bricolaje y el olfato en el caso de la jardinería”.
Por todo ello, bricolaje y jardinería no entienden de edad. Son dos actividades que nos hacen sentir realizados, funcionales y creativos en cualquier momento de nuestra vida, al tiempo que mejoramos nuestro entorno estéticamente.
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Estas actividades pueden asimismo potenciar y estimular las capacidades de los niños en sus diferentes etapas de desarrollo. Dice Rusiñol que “introducir actividades de bricolaje estimula el desarrollo de la inteligencia espacial”, es decir, la habilidad de apreciar con certeza la imagen visual y espacial, así como de representar gráficamente las ideas, el color, la línea, la forma, la figura, el espacio y todas sus interrelaciones.
Por su parte, la jardinería supone un estímulo para la inteligencia naturalista, por la que se mejora el entendimiento del entorno y la observación científica de la naturaleza, además de empezar a sensibilizarse por el cuidado del medio ambiente.
Aprende a decorar maceteros con tus hijos
Por su parte, la jardinería supone un estímulo para la inteligencia naturalista, por la que se mejora el entendimiento del entorno y la observación científica de la naturaleza, además de empezar a sensibilizarse por el cuidado del medio ambiente.
Aprende a decorar maceteros con tus hijos
En cuanto a la edad más adecuada para iniciarlos en estas aficiones, no hay una concreta. “Los niños desde bien pequeños utilizan sus manos para comunicarse con el mundo que les rodea y saber más sobre él” dice la psicóloga, “por ello, iniciarles desde una edad temprana en manualidades de todo tipo les estimulará la creatividad, la curiosidad y la autonomía”. Actualmente, son muchas las escuelas infantiles que cuentan con huerto urbano o que desarrollan actividades de manualidades para fomentar ese afán creativo, intrínseco en los niños.
Crea tu mini-huerto urbano en casa
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El bricolaje es, además, una interesante terapia para personas con algún tipo de discapacidad física o psíquica, ya que arreglar cosas o construirlas de cero aumenta la autoestima y nuestras propias capacidades. Todo ello actúa en conjunto como un factor terapéutico, educativo y social.
Si estás pensando en iniciarte en el bricolaje pero no tienes espacio suficiente para montar un taller o recursos para adquirir todo un equipo de herramientas, Philippe-Arnaud Audinay, técnico del portal de bricolaje Manoamano, recomienda optimizar el espacio teniendo en cuenta tres factores:
- Herramientas: Da prioridad a las multifunción, como una máquina combinada para carpintería, en la que se agrupen varias herramientas. De esta forma se ahorra espacio y dinero.
- Mesa de trabajo: Lo mejor son los bancos de trabajo plegables, que ocupan poco y se guardan en un rincón o debajo de la cama, ya que muchos se convierten en maletín.
- Limpieza: Es esencial para practicar bricolaje dentro de casa. Por lo que necesitarás una lona de protección y un aspirador compacto de obra, poco voluminoso y muy útil para dejar la zona tan limpia como estaba cuando acabes tu proyecto.
Por último, la psicóloga Elisabeth Rusiñol aconseja iniciarse poco a poco, abordando tareas de menor a mayor complejidad, “y siempre contando con altas dosis de realismo en relación a nuestras posibilidades”, lo cual te ayudará a no sentirte frustrado con proyectos alejados de tu nivel.
CUÉNTANOS…
¿Eres manitas? ¿Qué es lo que se te da mejor? Comparte tus aficiones de bricolaje o jardinería con nosotros.
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