Decoración
Descubre qué cortina le va a tu casa con los consejos de 4 expertos
Tradicional, visillo, screen, estor o panel japonés. Las ventanas pueden vestirse de muchas formas. Te contamos cuál es la más acertada.
Son muchos los factores que hay que tener en cuenta antes de elegir los elementos que tamizarán la luz y las vistas en tu hogar: dónde está ubicada la casa, el estilo decorativo de la vivienda, la ventana en concreto que vamos a vestir, la entrada de iluminación natural que recibe la estancia, si existe algún elemento que deseemos ocultar, como la caja de la persiana… Cuatro expertas nos cuentan las mejores soluciones para cada caso, ofreciendo claves tanto prácticas como decorativas.
Expertas consultadas:
Beatriz Gancedo Puig de la Bellacasa, directora de marketing de Gancedo decoración textil.
Margarita Antes, interiorista y cofundadora de Nimú.
Pilar Acebrón Fernández, propietaria de Pilar Acebrón Interiorismo online.
Mar Barroso Pidal, directora de proyectos en La Albaida Diseño Interior.
Expertas consultadas:
Beatriz Gancedo Puig de la Bellacasa, directora de marketing de Gancedo decoración textil.
Margarita Antes, interiorista y cofundadora de Nimú.
Pilar Acebrón Fernández, propietaria de Pilar Acebrón Interiorismo online.
Mar Barroso Pidal, directora de proyectos en La Albaida Diseño Interior.
A la hora de elegir las cortinas el abanico de posibilidades es casi infinito. A este respecto Beatriz Gancedo nos cuenta que “un espacio en el que se pueden cerrar las cortinas está más terminado y permite crear mayor intimidad. Esta opción no tiene por qué tener una connotación clásica si se utilizan tejidos lisos que coordinen con el resto de textiles que tiene la habitación. Se puede jugar con dos telas poniendo un bajo ancho como de 50 cm de un color y el resto de otro. O utilizar en los laterales un cambio de tela como si fuesen grecas”, explica.
Cuando no tenemos necesidad de preservar la intimidad con un visillo, Mar Barroso es partidaria de que “una cortina muy rica, con un tejido pesado que descanse sobre el suelo y esté recogida con alzapaños, vaya también acompañada de un visillo. Sin embargo, si no se tiene intención de poner visillo, entonces es preferible optar por una cortina más sencilla”.
Cuando no tenemos necesidad de preservar la intimidad con un visillo, Mar Barroso es partidaria de que “una cortina muy rica, con un tejido pesado que descanse sobre el suelo y esté recogida con alzapaños, vaya también acompañada de un visillo. Sin embargo, si no se tiene intención de poner visillo, entonces es preferible optar por una cortina más sencilla”.
En viviendas con poca entrada de luz natural, las expertas coinciden en optar por “cortinas caídas en textiles muy ligeros, visillos o tejidos screen y colores claros”. Para Pilar Acebrón, “el lino es mi tejido favorito en una circunstancia así”. Este tejido natural también sería la opción de Margarita Antes, quien nos cuenta: “Habría que seleccionar uno de poco gramaje en tonalidades suaves, de esta manera no impedirá la entrada de luz”.
Mar Barroso aconseja además “darle a estas cortinas bastante margen por los lados, para que cuando estén recogidas permitan la entrada de los rayos solares”.
7 ideas más para vestir las ventanas del salón
Mar Barroso aconseja además “darle a estas cortinas bastante margen por los lados, para que cuando estén recogidas permitan la entrada de los rayos solares”.
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Cuando necesitamos preservar la intimidad de las miradas del exterior, la solución perfecta son las “lamas de madera o cortinas venecianas. De esta manera se puede regular la entrada de luz y crear un filtro para ganar privacidad”, comenta Margarita.
Si preferimos optar por textiles, Pilar se inclina por combinar cortinas tupidas con estores muy ligeros, “así habrá luz durante el día pero al cerrar las cortinas durante la noche evitaremos que la estancia se convierta en un escaparate al exterior”.
Por su parte, Beatriz recomienda “los visillos y tejidos screen, ya que preservan la intimidad pero permiten ver el exterior a trasluz. Desde fuera no te ven, pero sin embargo tú sí que tienes perspectiva”.
Si preferimos optar por textiles, Pilar se inclina por combinar cortinas tupidas con estores muy ligeros, “así habrá luz durante el día pero al cerrar las cortinas durante la noche evitaremos que la estancia se convierta en un escaparate al exterior”.
Por su parte, Beatriz recomienda “los visillos y tejidos screen, ya que preservan la intimidad pero permiten ver el exterior a trasluz. Desde fuera no te ven, pero sin embargo tú sí que tienes perspectiva”.
En caso de contar con unas fabulosas vistas, “hay que elegir un tejido que arrope la ventana pero que no compita con el paisaje exterior”, comenta Mar. “Se trata de que tu vista se dirija al paisaje y la cortina o el estor enmarque el valor de la ventana, sin rivalizar con ella”, prosigue.
Pilar considera que “si se trata de un gran ventanal sin caja de persiana, ni ningún elemento antiestético que queramos ocultar, en espacios contemporáneos se puede dejar la cristalera sin vestir. Aunque si precisamos suavizar la entrada de sol se puede optar por un estor enrollable de tejido screen con un grado de apertura alto, del 5 ó 10%, para que atenúe la luminosidad dejando ver el exterior. En ambientes de estilo clásico, encajan más unas caídas ligeras en tonos claros y, si fuera necesario por el exceso de luminosidad, en combinación con un estor de screen con un grado de apertura alto, para seguir viendo con nitidez las vistas del exterior, incluso con el estor echado”.
Beatriz, además de unos estores que puedas subir y dejar todo el vano de la ventana abierto, añadiría “cualquier opción que se pueda mover hacía los lados: paneles japoneses, cortinas o visillos”.
Por último, Margarita señala al respecto que “para conseguir que nuestro exterior forme parte del interior, yo optaría por no poner ningún filtro o, como máximo, me decantaría por un tejido screen”.
Pilar considera que “si se trata de un gran ventanal sin caja de persiana, ni ningún elemento antiestético que queramos ocultar, en espacios contemporáneos se puede dejar la cristalera sin vestir. Aunque si precisamos suavizar la entrada de sol se puede optar por un estor enrollable de tejido screen con un grado de apertura alto, del 5 ó 10%, para que atenúe la luminosidad dejando ver el exterior. En ambientes de estilo clásico, encajan más unas caídas ligeras en tonos claros y, si fuera necesario por el exceso de luminosidad, en combinación con un estor de screen con un grado de apertura alto, para seguir viendo con nitidez las vistas del exterior, incluso con el estor echado”.
Beatriz, además de unos estores que puedas subir y dejar todo el vano de la ventana abierto, añadiría “cualquier opción que se pueda mover hacía los lados: paneles japoneses, cortinas o visillos”.
Por último, Margarita señala al respecto que “para conseguir que nuestro exterior forme parte del interior, yo optaría por no poner ningún filtro o, como máximo, me decantaría por un tejido screen”.
Manuel Cánovas
Las cortinas caídas ofrecen variadas ventajas. Por ejemplo, “las cortinas y visillos tienen una función aislante, aportan calidez e intimidad. En habitaciones pequeñas y con poca luminosidad es mejor poner caídas con telas vaporosas y ligeras que cortinajes pesados”, propone Pilar. Además, para Beatriz, “son un elemento decorativo que adorna el espacio. Pueden tapar las cuerdas de los visillos, los estores, una viga… o simplemente formar parte de la propuesta estética de la habitación”.
Otro punto que hay que tener en cuenta, según Margarita, es que “ayudan a resaltar la altura de la estancia”, y nos revela además un secreto práctico: “Cuanto más alto situemos las cortinas, más caída tendrán”. Mar nos explica, igualmente, que “en una ventana muy grande las caídas permiten que la cristalera se vea vestida, reduciendo el presupuesto con respecto a otras opciones más costosas”.
Lo que ya es decisión personal es si quieres confeccionar las cortinas largas, para que descansen holgadamente sobre el suelo, o cortarlas a ras de éste.
Cómo usar unas cortinas para crear divisiones flexibles y económicas
Otro punto que hay que tener en cuenta, según Margarita, es que “ayudan a resaltar la altura de la estancia”, y nos revela además un secreto práctico: “Cuanto más alto situemos las cortinas, más caída tendrán”. Mar nos explica, igualmente, que “en una ventana muy grande las caídas permiten que la cristalera se vea vestida, reduciendo el presupuesto con respecto a otras opciones más costosas”.
Lo que ya es decisión personal es si quieres confeccionar las cortinas largas, para que descansen holgadamente sobre el suelo, o cortarlas a ras de éste.
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Emplear cortinas en combinación con visillos resulta acertado “cuando se tiene gran entrada de luz y quieres ser dueño de ella, porque de este modo la podremos graduar muy bien”, apunta Margarita.
Beatriz opina que esta opción “es la más adecuada para habitaciones de medianas o generosas dimensiones. De otro modo se abarrotaría visualmente el espacio. A mí particularmente me encantan, porque el espacio se ve más decorado”.
Mar tiene claro que apostaría por esta doble caída “cuando el visillo es suficiente para tamizar la luz y dar intimidad, pero si con solo este elemento se viera pobre. De este modo añadimos las caídas como elemento puramente decorativo, sin efectos prácticos”.
Beatriz opina que esta opción “es la más adecuada para habitaciones de medianas o generosas dimensiones. De otro modo se abarrotaría visualmente el espacio. A mí particularmente me encantan, porque el espacio se ve más decorado”.
Mar tiene claro que apostaría por esta doble caída “cuando el visillo es suficiente para tamizar la luz y dar intimidad, pero si con solo este elemento se viera pobre. De este modo añadimos las caídas como elemento puramente decorativo, sin efectos prácticos”.
¿Optar solo por caídas livianas? Es también una apuesta ganadora pues así “conseguirás dotar al espacio de mucha luz siendo translúcido y consiguiendo privacidad a la vez”, señala Margarita.
Al contrario que las cortinas, los visillos son perfectos “cuando buscamos un efecto más ligero, más fresco. En caso de poner sólo visillo es bueno optar por un tejido más decorativo en sí mismo, o con una trama un poco más gruesa, aunque no necesariamente muy coloridos ni estampados”, cuenta Mar.
De igual manera, “el visillo en una habitación pequeña es adecuado, porque ni siquiera abierto ocupa espacio y, no obstante, decora”, apunta Beatriz.
Al contrario que las cortinas, los visillos son perfectos “cuando buscamos un efecto más ligero, más fresco. En caso de poner sólo visillo es bueno optar por un tejido más decorativo en sí mismo, o con una trama un poco más gruesa, aunque no necesariamente muy coloridos ni estampados”, cuenta Mar.
De igual manera, “el visillo en una habitación pequeña es adecuado, porque ni siquiera abierto ocupa espacio y, no obstante, decora”, apunta Beatriz.
Para Pilar el screen no tiene más que ventajas. Estos tejidos están fabricados con hilos de fibra de vidrio recubiertos de PVC. “Protegen de los rayos solares evitando que la madera y tapicerías del interior se deterioren con la radiación solar, permiten graduar según el factor de apertura el paso de luz y la visibilidad del exterior, son de fácil limpieza, se pueden utilizar para estores, paneles japoneses y lamas verticales y, a todo ello hay que añadir la enorme diversidad de colores en los que se encuentran disponibles”, dice Pilar.
En cuanto al grado de apertura de la malla nos aconseja: “Si en la estancia incide mucho el sol, necesitas privacidad pero quieres seguir intuyendo el exterior, utiliza un grado de apertura reducido, de 1-3%.
Si buscas un buen equilibrio entre luminosidad, privacidad y visibilidad, escoge un grado de apertura medio del 5%. Mientras que si deseas que entre la mayor cantidad de luz y ver con nitidez las vistas del exterior, apuesta por un grado de apertura alto, del 10%”.
Beatriz destaca, además, que “es un material muy práctico en cuanto a limpieza y da un aspecto moderno y funcional a la habitación. Han salido muchas versiones distintas. Ahora hay diseños con texturas o incluso se pueden estampar”.
Mar, sin embargo, es menos entusiasta, lo tiene claro y se muestra así de taxativa: “El screen es una solución técnica, no decorativa. Así, se opta por él cuando se necesita tamizar la luz en mayor o menor medida según el grosor de la malla, pero no se busca decorar la ventana con él ”, concluye.
Descubre las mejores empresas de cortinas, persianas y estores
En cuanto al grado de apertura de la malla nos aconseja: “Si en la estancia incide mucho el sol, necesitas privacidad pero quieres seguir intuyendo el exterior, utiliza un grado de apertura reducido, de 1-3%.
Si buscas un buen equilibrio entre luminosidad, privacidad y visibilidad, escoge un grado de apertura medio del 5%. Mientras que si deseas que entre la mayor cantidad de luz y ver con nitidez las vistas del exterior, apuesta por un grado de apertura alto, del 10%”.
Beatriz destaca, además, que “es un material muy práctico en cuanto a limpieza y da un aspecto moderno y funcional a la habitación. Han salido muchas versiones distintas. Ahora hay diseños con texturas o incluso se pueden estampar”.
Mar, sin embargo, es menos entusiasta, lo tiene claro y se muestra así de taxativa: “El screen es una solución técnica, no decorativa. Así, se opta por él cuando se necesita tamizar la luz en mayor o menor medida según el grosor de la malla, pero no se busca decorar la ventana con él ”, concluye.
Descubre las mejores empresas de cortinas, persianas y estores
Los estores de lamas ofrecen una clara ventaja respecto a otros sistemas, apunta Mar: “El mismo elemento sirve para que pase la luz dando cierta intimidad, o para tapar completamente la luz, según el ángulo que le des a la lama”.
“Las lamas de madera son muy útiles cuando necesitas filtrar la incidencia de luz en una estancia. Pueden ser una solución en cocinas y baños por su buena resistencia a la humedad”, añade Margarita.
Del mismo modo Pilar opina que “es un elemento perfecto para graduar la luz, creando ambientes muy cálidos, agradables y acogedores”.
Beatriz por su parte colocaría lamas venecianas en lugares en los que no se tenga que abrir y cerrar continuamente, dado que no son muy prácticas de usar. En cuanto al estilo que imprimen, le gustan cuando “se quiere conseguir una imagen colonial o dar un aspecto elegante a una oficina”.
Cambia las ventanas: Ganarás en confort y ahorrarás energía
“Las lamas de madera son muy útiles cuando necesitas filtrar la incidencia de luz en una estancia. Pueden ser una solución en cocinas y baños por su buena resistencia a la humedad”, añade Margarita.
Del mismo modo Pilar opina que “es un elemento perfecto para graduar la luz, creando ambientes muy cálidos, agradables y acogedores”.
Beatriz por su parte colocaría lamas venecianas en lugares en los que no se tenga que abrir y cerrar continuamente, dado que no son muy prácticas de usar. En cuanto al estilo que imprimen, le gustan cuando “se quiere conseguir una imagen colonial o dar un aspecto elegante a una oficina”.
Cambia las ventanas: Ganarás en confort y ahorrarás energía
No vestir la ventana también es una opción, por la que se decantan especialmente los arquitectos. En este sentido, Margarita explica que “hay vidrios inteligentes que pueden ser accionados con solo pulsar un interruptor, facilitando en un instante la intimidad deseada. Así pues, es una alternativa ideal de privacidad en ventanas, baños, separación de habitaciones o división de oficinas”.
Pilar apunta, para terminar, que “la nanotecnología aplicada al vidrio ofrece soluciones muy interesantes para el ahorro energético, la visibilidad y la privacidad. Yo aconsejo ponerse en manos de especialistas para encontrar la mejor solución en cada caso. Las láminas de protección solar que se instalan sin necesidad de desmontar el cristal son una buena alternativa, reducen hasta un 82% el calor y proporcionan intimidad diurna”.
CUÉNTANOS…
¿Te ha ayudado este artículo a encontrar el modelo ideal para vestir tus ventanas? Enséñanos el resultado subiendo una foto en los comentarios.
Pilar apunta, para terminar, que “la nanotecnología aplicada al vidrio ofrece soluciones muy interesantes para el ahorro energético, la visibilidad y la privacidad. Yo aconsejo ponerse en manos de especialistas para encontrar la mejor solución en cada caso. Las láminas de protección solar que se instalan sin necesidad de desmontar el cristal son una buena alternativa, reducen hasta un 82% el calor y proporcionan intimidad diurna”.
CUÉNTANOS…
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Pero si optas por textiles, debes tener en cuenta que en climas calurosos es más conveniente usar tejidos vaporosos y livianos, mientras que en los más fríos, como en las casas de montaña, deben predominar los tejidos pesados. Para conseguir ambientes en armonía conviene hacer caso a lo que nos pida cada espacio. A continuación os detallamos todas las claves que hay que tener en cuenta para acertar con la cortina perfecta.