Casas Houzz
Casas Houzz: Un loft de 57 m² en Valencia con rincones ocultos
Ladrillo visto, un único espacio abierto, luz: la ortodoxia del estilo industrial condensada en una casa pequeña.
Esta casa entre medianeras, en el histórico barrio de El Cabanyal, Valencia, fue construida a principios de siglo XX. Un espacio pintoresco y único al que le faltaba un punto de modernidad para adaptarse a la vida de su dueño, José Martí, un activo joven vinculado a la música: “Yo tenía muy claro lo que quería: una terraza, espacio, luz y un altillo –dice–. El resultado es una casa que propicia estados mentales positivos para vivir y para trabajar”. ¿Será por la mezcla de texturas y colores? ¿Quizás por la perfecta comunión entre lo antiguo y lo nuevo? ¿O por el grafiti de 1919 que hay en la viga principal?
El cambio ha sido radical: de la vivienda original, muy compartimentada y con cocina y aseo en anexos, se pasa a un espacio abierto y lleno de luz, en el que la única pieza cerrada es el baño.
Dejar el techo visto con la cubierta a dos aguas fue un reto: “La vivienda tenía por techo un cielo raso de cañizo y yeso que ocultaba la cubierta a dos aguas. Sabíamos que la cubierta existía, el miedo era ver su estado de conservación, pero la verdad es que estaba sucio pero perfecto. Dejarlo visto era una apuesta segura, pero influía en el paso de instalaciones, que tuvimos que diseñar para que quedaran ocultas”, explica Carlos.
Dejar el techo visto con la cubierta a dos aguas fue un reto: “La vivienda tenía por techo un cielo raso de cañizo y yeso que ocultaba la cubierta a dos aguas. Sabíamos que la cubierta existía, el miedo era ver su estado de conservación, pero la verdad es que estaba sucio pero perfecto. Dejarlo visto era una apuesta segura, pero influía en el paso de instalaciones, que tuvimos que diseñar para que quedaran ocultas”, explica Carlos.
La luz y los espacios en la casa son agradables, creando distintas atmósferas dentro de un ambiente único. En la imagen, la zona de comedor; al fondo, de izquierda a derecha, las dos puertas que conducen al cuarto de baño y a la pequeña terraza, respectivamente.
“El cliente es un chico joven con una manera peculiar de vivir y de sentir, trabaja en el mundo de la música y se relaciona con gente joven con inquietudes artísticas. Preocupado por la naturaleza y el mundo estético, pidió respetar al máximo los elementos originales de la casa”, cuenta Carlos.
“El cliente es un chico joven con una manera peculiar de vivir y de sentir, trabaja en el mundo de la música y se relaciona con gente joven con inquietudes artísticas. Preocupado por la naturaleza y el mundo estético, pidió respetar al máximo los elementos originales de la casa”, cuenta Carlos.
“El suelo, en un color plano, dialoga con las vigas y elementos preexistentes de madera y, además, da un aspecto algo rústico al espacio”, explica Carlos. Por el contrario, la lineal cocina, el elemento moderno más llamativo de la casa, se eligió en color gris, para independizarla del resto espacio.
La casa no dispone de calefacción: la orientación de las cubiertas y su constante asoleo hacen que no sea necesaria.
Suelos de madera: Cómo disponer las lamas según el estilo que se busque
La casa no dispone de calefacción: la orientación de las cubiertas y su constante asoleo hacen que no sea necesaria.
Suelos de madera: Cómo disponer las lamas según el estilo que se busque
Las texturas propias de la vivienda –pilares, paredes de ladrillo– conviven con los elementos nuevos “sin chillarse”: “Había mucho que queríamos respetar pero también cosas a introducir, nos esforzamos para que la mezcla de materiales tuviera sentido”. Los electrodomésticos son de Balay; la grifería, de Tres y la encimera es de cuarzo, color Glaciar, de Compac.
Cómo combinar materiales tradicionales y contemporáneos
Cómo combinar materiales tradicionales y contemporáneos
Las antiguas carpinterías se han restaurado y pintado de blanco. Una vieja alacena se recupera y hace las veces de estantería, guardarropa, despensa y almacén. Sorprende el equilibrio entre las carpinterías pintadas de blanco y las vigas de madera al natural.
En cuanto a la iluminación, no hay ninguna lámpara de techo, solo focos –de la firma Arkoslight, en su mayoría.
“Teníamos varias intenciones: evitar cableados vistos, no utilizar elementos muy llamativos que restasen protagonismo a la arquitectura, iluminaciones versátiles y diseños claramente actuales”, detalla Carlos de Ambau.
“Teníamos varias intenciones: evitar cableados vistos, no utilizar elementos muy llamativos que restasen protagonismo a la arquitectura, iluminaciones versátiles y diseños claramente actuales”, detalla Carlos de Ambau.
Al cuarto de baño se accede por la puerta de la cocina. Funcional y amplio, destaca de nuevo la mezcla de texturas, con una pared de alicatado actual, otra de ladrillo visto y la carpintería de madera vieja. “Este contraste resume bien la esencia de la casa”, apunta Carlos. La Ebanistería Emilio Valdés Escribano es la empresa valenciana encargada de los trabajos de restauración de la carpintería. La ventana del baño da a la terraza.
Tras la ducha, con acceso por la terraza, está el lavadero original, de 80 cm de ancho.
Tras la ducha, con acceso por la terraza, está el lavadero original, de 80 cm de ancho.
La terraza original se había cubierto con una techumbre apoyada en dos vigas transversales; los arquitectos decidieron recuperar este espacio al aire libre, manteniendo las vigas y colocando un suelo es tarima de madera de Ipé, muy resistente. El acceso es a través de la segunda puerta de la cocina –la primera, abre paso hacia el baño.
“Habíamos hecho una terraza cubierta con zona de jardinería a los padres del cliente. Es una familia peculiar: van a todos lados en bici, tienen huertos urbanos y, en general, comparten una forma de entender el mundo muy característica”, desvela el arquitecto.
“Habíamos hecho una terraza cubierta con zona de jardinería a los padres del cliente. Es una familia peculiar: van a todos lados en bici, tienen huertos urbanos y, en general, comparten una forma de entender el mundo muy característica”, desvela el arquitecto.
La cortina de macramé es un guiño a las tradiciones del barrio y establece una sutil distancia entre el exterior y el interior.
“Nuestros proyectos tratan de dar respuesta a un tipo de vida en la que se llevan los espacios abiertos y se reducen las zonas privadas a las dimensiones meramente funcionales, haciendo de la cocina un espacio familiar y abierto, y sacando el máximo provecho del espacio público de la casa”, dice Carlos.
El patio, que antes de la reforma servía para dar luz a las estancias interiores, se convierte en un lucernario y donde se ha ubicado la escalera que conduce al único dormitorio. Una antigua ventana se conserva como pieza decorativa.
Germán Cabo es el autor de las fotos de esta historia y aún recuerda las sensaciones la primera vez que entró en casa de José: “La vivienda no te lo enseña todo de golpe, te mantiene unos momentos descubriendo rincones ocultos. Me enamoré particularmente de la ventana que da a la escalera y que permite la entrada de la luz cenital al comedor”, dice el fotógrafo especializado en arquitectura.
Germán Cabo es el autor de las fotos de esta historia y aún recuerda las sensaciones la primera vez que entró en casa de José: “La vivienda no te lo enseña todo de golpe, te mantiene unos momentos descubriendo rincones ocultos. Me enamoré particularmente de la ventana que da a la escalera y que permite la entrada de la luz cenital al comedor”, dice el fotógrafo especializado en arquitectura.
Situando el dormitorio en el altillo, la planta baja queda diáfana. “Los espacios abiertos te permiten un día hacer una fiesta de 50 personas y, al siguiente, crear un rincón para una cena romántica o quedarte trabajando inmerso entre pilas de libros. Nuestra generación vive con normalidad invitar a alguien a casa y que vea que no pusimos el lavavajillas o que hay ropa por doblar –total, seguramente ya lo habremos publicado en las redes sociales [risas]”, reflexiona el arquitecto Carlos Luengo.
Espacios de planta abierta: ¿Fin de una era o una moda que perdurará?
Espacios de planta abierta: ¿Fin de una era o una moda que perdurará?
Como en la planta de abajo, en el altillo dominan los tonos neutros y piezas de mobiliario sobrias y funcionales.
La limpieza del entramado del techo no fue tarea fácil. Se dejó sin tocar el trozo de la viga principal que vemos en la imagen, “donde estaba escrita la fecha de construcción de la casa (o eso quisimos pensar): ‘27 Octubre 1919”, desvela Carlos.
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¿Qué te ha llamado la atención de esta casa en Valencia? Comparte tus opiniones en la sección de comentarios
La limpieza del entramado del techo no fue tarea fácil. Se dejó sin tocar el trozo de la viga principal que vemos en la imagen, “donde estaba escrita la fecha de construcción de la casa (o eso quisimos pensar): ‘27 Octubre 1919”, desvela Carlos.
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Quién vive aquí: Un chico joven que trabaja en la industria de la música
Situación: Barrio del Cabañal, Valencia
Superficie: 57 metros cuadrados y 17 de terraza
Proyecto: Ambau en colaboración con el arquitecto Santiago García
Fotografia: Germán Cabo
La fachada principal da a una de las calles típicas del barrio, con esas construcciones de mediana altura que configuran el look tan característico de esta parte de Valencia, a un paso de la playa de la Malvarrosa. “El mar, que queda a unos 15 minutos a pie: no se ve, pero se siente”, dice Carlos Luengo, del estudio Ambau, responsables del proyecto junto al arquitecto Santiago García, amigo de la familia del cliente.