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Conoce la historia de la sauna y descubre cómo disfrutarla en casa
Se trata de una tradición nórdica con múltiples efectos terapéuticos. Repasamos la historia de la sauna y sus últimos avances.
Los baños de vapor a alta temperatura tienen un efecto purificador a todos los niveles para el cuerpo humano. Las tecnologías actuales multiplican sus beneficios para la salud y los convierten en una experiencia de relajación para los cinco sentidos. Gracias a modelos compactos ya es posible disfrutar de todas sus ventajas en casa, sin necesidad de desplazarse a un spa. Si estás interesado en instalar una sauna en tu vivienda, toma nota.
En el baño turco o hamam, más relacionado con las prácticas de baño de los romanos, la temperatura suele ser inferior a los 70°C y la humedad relativa es muy alta. En la sauna, las temperaturas varían entre los 80°C y 90°C y la humedad no supera el 20%.
Ambos tienen efectos muy variados y saludables para el cuerpo humano. Mediante la sudoración, la piel se desintoxica, se limpian las vías respiratorias y se activa la circulación sanguínea. Debido a su carácter relajante, son también prácticas muy beneficiosas para problemas de estrés y ansiedad. En este artículo nos vamos a centrar en la sauna seca o finlandesa.
Ambos tienen efectos muy variados y saludables para el cuerpo humano. Mediante la sudoración, la piel se desintoxica, se limpian las vías respiratorias y se activa la circulación sanguínea. Debido a su carácter relajante, son también prácticas muy beneficiosas para problemas de estrés y ansiedad. En este artículo nos vamos a centrar en la sauna seca o finlandesa.
Un poco de historia. La sauna es toda una institución en Finlandia, donde se calcula que existe una por cada tres habitantes. Aunque es la palabra finlandesa más internacionalmente difundida, este tipo de baño no es suyo exclusivamente. Otras culturas, como los romanos, turcos, celtas, indios americanos, japoneses, rusos o mexicanos, poseen construcciones y costumbres parecidas. Sin embargo, los finlandeses son el pueblo que más ha conservado, desarrollado y difundido esta tradición.
En las saunas primitivas se calentaba una pila de rocas a altas temperaturas, mediante grandes cantidades de madera. Sobre ellas se arrojaba agua para producir vapor o löyly en finés.
Se cree que este tipo de prácticas ya se realizaban en los hogares de la Edad de Piedra, hace más de 6.000 años. Entre los siglos V y VIII fue cuando empezaron a proliferar en Finlandia cabañas de madera para este fin.
Se cree que este tipo de prácticas ya se realizaban en los hogares de la Edad de Piedra, hace más de 6.000 años. Entre los siglos V y VIII fue cuando empezaron a proliferar en Finlandia cabañas de madera para este fin.
La sauna, en sus orígenes, tenía un carácter sagrado. Se situaba en el patio de las casas y, no fue hasta el siglo XX que se comenzaron a construir en la orilla de los lagos, al igual que en algunas viviendas señoriales.
Convierte tu baño en un spa de lujo
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Antiguamente se tomaba una sauna a la semana, ya que la preparación del recinto duraba todo un día. Se hacía desnudo y en turnos diferenciados de hombres y mujeres. La sauna se entendía no solo como una purificación del cuerpo, sino también del espíritu.
Hasta la primera mitad del siglo XX era también el lugar donde se daba a luz y donde se amortajaba a los muertos. Otras muchas actividades que se realizaban en ella estaban vinculadas al calendario agrario y folclórico.
Según la tradición, el silencio y el recogimiento eran la actitud que se debía tener en una sesión de sauna y estaba prohibido alborotar, chismorrear o llevar a cabo cualquier actividad que alterara su paz.
Hasta la primera mitad del siglo XX era también el lugar donde se daba a luz y donde se amortajaba a los muertos. Otras muchas actividades que se realizaban en ella estaban vinculadas al calendario agrario y folclórico.
Según la tradición, el silencio y el recogimiento eran la actitud que se debía tener en una sesión de sauna y estaba prohibido alborotar, chismorrear o llevar a cabo cualquier actividad que alterara su paz.
Con la Revolución Industrial comenzaron a utilizarse en ellas las estufas de metal de leña con una chimenea. Este avance posibilitó la construcción de este tipo de recintos en lugares donde por el humo antes era impensable, como por ejemplo las ciudades.
Pero con la llegada del cuarto de baño a los hogares, ya en el siglo XX, esta tradición podría haber caído en desuso si no hubiera sido por las saunas públicas. Estas tenían secciones separadas para hombres y mujeres, y ofrecían servicios extra para el cuidado de cuerpo y mente así como masajistas o lavandería.
Pero con la llegada del cuarto de baño a los hogares, ya en el siglo XX, esta tradición podría haber caído en desuso si no hubiera sido por las saunas públicas. Estas tenían secciones separadas para hombres y mujeres, y ofrecían servicios extra para el cuidado de cuerpo y mente así como masajistas o lavandería.
Al final de la segunda guerra mundial existían en Helsinki casi ciento cincuenta saunas públicas. Con el desarrollo de la estufa eléctrica ya no era necesario un horno de leña ni una salida de humos, así que comenzaron a construirse saunas en los edificios de viviendas para el disfrute de sus habitantes.
Actualmente, un gran número de apartamentos cuentan en este país con una estancia dedicada a este fin, generalmente ubicada junto al baño.
Actualmente, un gran número de apartamentos cuentan en este país con una estancia dedicada a este fin, generalmente ubicada junto al baño.
La cabina y la estufa son los elementos fundamentales de una sauna. Tradicionalmente, las cabinas vienen estando construidas en madera y poseen varias bancadas a diferentes niveles así como una estufa eléctrica cubierta de piedras que calienta el recinto y produce vapor al echar agua sobre ellas.
También se puede optar por ocultar el calefactor y dosificar el agua de forma automática o a través de una bandeja, siendo posteriormente canalizada mediante un tubo hacia el calefactor.
También se puede optar por ocultar el calefactor y dosificar el agua de forma automática o a través de una bandeja, siendo posteriormente canalizada mediante un tubo hacia el calefactor.
Adicionalmente, las acompañan elementos que sirven para enfriar el cuerpo, que pueden ser artificiales (piscinas, bañeras o una sencilla ducha) o naturales (ríos y lagos).
De baño antiguo a spa familiar
De baño antiguo a spa familiar
Actualmente, en el mercado se pueden encontrar saunas prefabricadas completamente automatizadas que permiten regular la temperatura, la humedad y otras características como una ambientación con luz de colores y sonido, cuyas combinaciones se pueden programar y guardar para futuros usos.
Además, los beneficios terapéuticos de la sauna se pueden multiplicar mediante la emisión de ondas de rayos infrarrojos dentro de la cabina. Estas producen el calentamiento del cuerpo y una aceleración de la circulación sanguínea y de la transpiración.
El cuerpo se relaja, se eliminan toxinas, incrementa la flexibilidad de los tejidos, aumenta la elasticidad de las articulaciones y su efecto también contribuye a quemar grasas y a reducir peso.
El cuerpo se relaja, se eliminan toxinas, incrementa la flexibilidad de los tejidos, aumenta la elasticidad de las articulaciones y su efecto también contribuye a quemar grasas y a reducir peso.
Finalmente, los últimos avances tecnológicos han convertido este ancestral rito en una experiencia para los cinco sentidos mediante cromoterapia, musicoterapia, aromaterapia y hasta relajantes cielos estrellados en el techo.
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¿Tienes una sauna en casa? Comparte tu experiencia con nosotros.
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